Enseguida me puse manos a la obra porque pensé que lo tendría difícil y no habría muchas posibilidades, grave error por mi parte, enseguida encontré muchas recetas y nada complicadas, a excepción de los nombrecitos, jijijiiii, así que el traductor de San google ha tenido que ayudar en esta ocasión también.
Al final me decanté por esta "Sernik Krakowski" aggggggg vaya tela con el nombrecito, impronunciable, pero dulce y delicada al paladar.
Se trata de una tarta de queso espectacular, cuya base es una especie de pasta frola y cubierta de un enrejado de esta misma pasta.
Esta tarta es típica de la zona de Cracovia y como curiosidad, no se hornea en molde redondo como nuestros tradicionales cheesecake, sino en moldes rectangulares.
¿motivo? pues sinceramente no lo sé, pero casi el 100% de imágenes que he encontrado son tartas rectangulares y curiosona que es una, jijiii, por más que he preguntado el motivo a san google y con ayuda de su traductor he buscado en foros y blogs y no he encontrado la respuesta.
Primero de todo prepararemos la base. Mezclaremos todos sus ingredientes. Fomaremos una bola, la envolveremos en un film transparente y la meteremos en la nevera durante mínimo una hora.
Hidrataremos las uvas pasas, si queréis podéis hacerlo con algún licor que os guste.
Forraremos el molde que vayamos a utilizar. Estirar la masa de la base que teníamos reservada y forraremos la base de la bandeja (reservar masa para hacer el enrejado). Hornearemos durante unos 20 minutos a 180º o hasta que veamos que está doradita.
Mientras tanto mezclaremos todos los ingredientes del pastel de queso. Cuando esté horneada la base, volcaremos el preparado de queso.
Con la masa que nos sobró de la base, habremos hecho unas tiras y cubriremos la tarta de queso en forma de enrejado. Pintar con huevo y hornear durante unos 30 minutos.
y listo, dejar enfriar y comer. Mejor de un día para otro y conservar en el frigorífico.
Bon profit !!!