Sorbete de melocotón y tomillo

Una de las sorpresas del final del verano (¿final? ¿pero si acaba de empezar, no?) son los melocotones que estoy recogiendo de un arbol que tengo en el jardin. Digo sorpresa porque algo ha ocurrido este verano, o más probablemente esta primavera? para que hayamos pasado de tener durante los últimos años unos melocotones enanos, pochos, verdes e incomibles, a ahora poder disfrutar de unos frutos de buen tamaño, perfume delicioso y de sabor dulce, siempre teniendo en cuenta que a pesar de que no sé mucho de arboles frutales, mi intuición me dice que no vivo en el clima más adecuado para la producción de estos manjares.

Así que me veo, aprovechando el momento al máximo, saliendo a todas horas a observar si el fruto al que le tengo echado el ojo ha madurado en los últimos 10 minutos, o si mejor espero un ratito más.

Este sorbete de melocotón y tomillo, me ha parecido una buena idea para acompañar estos dias de calor húmedo que estamos pasando y aprovechar esta buena racha melocotonera. Combinar el melocotón con el tomillo ha sido en mi opinión un acierto. Concretamente, el tomillo limón (o limonero) es ya un conocido de muchos a la hora de acompañar natillas o macedonias de frutas y en este caso el resultado ha sido un sorbete con un toque especial, muy ligeramente perfumado.



 

TIEMPO DE PREPARACIÓN

20 minutos

UTENSILIOS

Una jarra medidora
Una bascula de cocina
Una cazuela
Batidora ó trituradora
Recipiente amplio apto para el congelador
Un tenedor o unas varillas
INGREDIENTES

900 gr de melocotones enteros (8 ó 9 piezas, dependiendo del tamaño)

uno u dos sobres de infusión de tomillo ( en mi caso, he usado tomillo limón que combina muy bien con las frutas, en especial, el melocotón)

el zumo de medio limón (2 cucharadas)

225 gr de azúcar

240 ml de agua
ELABORACIÓN

Prepara una infusión de tomillo con la cantidad de agua necesaria y déjala reposar durante 10 minutos. Retira los sobres y vierte la infusión ya preparada en una cazuela junto con el azúcar. Calienta la mezcla hasta que el azúcar y el agua formen un almíbar, el azúcar se habrá disuelto y tendremos un líquido un poco más espeso que el agua. Reserva y déjalo enfriar.
Pela y trocea los melocotones. Como los melocotones que he usado estaban aun un poquito verdes, les he dado un golpe de calor en la cazuela durante unos 5 minutos junto con el zumo de limón. Si los que tu tienes en casa, están ya maduros, sáltate este paso, y tritúralos directamente junto con el limón hasta conseguir un puré fino.
Añade el almíbar al puré de melocotón.
Enfría la mezcla en el frigorífico antes de meterla en el congelador.
Si tienes heladera, sigue las instrucciones del fabricante.
Si como yo, no tienes una heladera, una vez fría, mete la mezcla en el congelador asegurándote de batirla con unas varillas eléctricas o con un tenedor, cada media hora hasta que adquiera una consistencia espesa.
Deja el sorbete en el congelador durante toda la noche antes de servir.



NOTAS

El tomillo limón combina muy bien en esta receta, da un sabor muy suave al sorbete en general, pero si prefieres no utilizarlo, solo tienes que usar agua a la hora de hacer el almíbar en lugar de la infusión.

No te recomiendo que reduzcas la cantidad de azúcar que lleva la receta ya que afectaría mucho la consistencia del sorbete en general, formando pequeños cristales de hielo en su interior. Según he podido leer, se puede sustituir el azúcar por otros edulcorantes en forma líquida, tal como el sirope de agave. No creo que tarde mucho en hacer la prueba y contarte como me ha ido.
FUENTE

Principalmente, este articulo en inglés sobre como hacer sorbete de The Kitchn.