Me encanta el aspecto y me encanta el sabor, me parece de lo más elegante, además con los días mejora el sabor y si sobra podemos disfrutarla hasta una semana guardada en la nevera.
Hemos hecho la versión mini de 16 cm de diámetro para 6 personas normales o 4 tragones, si duplicas las cantidades necesitarás usar un molde de 24 cm.
¿Qué música estará a la altura de esta maravilla?
Una de esas canciones que le gustan a todo el mundo, en versión ligera.
Ingredientes para un molde de 16 cm de diámetro:
125 gr de azúcar
60 gr de mantequilla a temperatura ambiente
2 huevos pequeños
1/2 cucharadita de esencia de vainilla o azúcar vainillado
500 gr de queso quark
20 gr de Maizena
40 gr de sémola de trigo
1/2 sobre de levadura química
El zumo y la ralladura de un limón de cultivo ecológico
Azúcar glas para espolvorear
Preparación:
En un cuenco grande batir con varillas el azúcar y los huevos hasta que espumen, añadir la mantequilla, el zumo, la ralladura de limón y la vainilla y seguir batiendo hasta que se incorporen al conjunto.
Añadimos el queso y seguimos batiendo, por fin añadimos la Maizena y la sémola tamizadas con la levadura.
Engrasamos el molde con aceite de girasol o con mantequilla, echamos la masa preparada y la nivelamos. Horneamos a 150ºC con aire o a 160ºC calor arriba y abajo durante 50 o 60 minutos. Pinchar con un palillo para verificar que la tarta está cuajada y dejar enfriar dentro del horno con la puerta abierta 20 minutos y luego sobre una rejilla.
Una vez completamente fría desmoldamos y ponemos en un plato para tartas.
Podemos servirla tal cual o espolvorear con azúcar glas para un toque divino.
Esta tarta es realmente fácil de hacer, está al alcance de cualquiera y es un postre fantástico para el fin de semana o para regalar a los amigos. Te aseguro que se van a acordar de ti.
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