La verdad es que no hay excusas para no prepararla. Es un postre ligero, que se hace rápido y que está buenísima. Es el final perfecto para la comida, porque no hincha y entra muy bien. Llevaba ya tiempo queriendo hacer una tarta de yogur así, y estoy muy contenta con el resultado!
Hay dos maneras de hacerla, o cremosa gelatinizada (como un yogur), o más esponjosa, como una mousse. En las instrucciones os explico cómo hacer ambas, pero yo he escogido la opción mousse.
Para hacerla aún más light y darle un toque original, la base no lleva mantequilla… ¡lleva moras! Tenía moras preparadas para decorarla, y mientras estaba triturando las galletas he pensado, “oye Noelia, ¿y si le ponemos moras en lugar de mantequilla? ¿Quedará bien esto?“, y sí, ha quedado genial! Le da un color muy bonito que no se aprecia del todo en las fotos (soy buena haciendo tartas, pero la fotografía y yo tenemos que hacernos más amigas), un toque dulce y una originalidad que llama la atención al instante.
Además, nos puede servir como postre si tenemos invitados porque cada uno se puede servir lo que quiera, tiene un sabor que le gusta a todo el mundo, y lo mejor de todo: la puedes dejar preparada el día antes para ir con más calma. Eso sí, cuando guardéis tartas en la nevera durante varios días acordaos de taparlas con un poco de papel de aluminio para evitar que cojan olores de otras cosas.
La variedad aquí la podéis conseguir con el yogur. Para tener una textura suave y cremosa, yo he usado yogur griego (obviamente sin azúcar). Podéis usar el yogur que os apetezca, manteniendo las cantidades e intentando que sea ligerito. El molde que he usado en esta ocasión es de 15cm porque éramos poquitos, pero podéis doblar las cantidades y usar uno de 24-26cm sin problema.
Espero que os guste, en casa ha encantado y estoy segura de que la voy a hacer más veces
¡Aquí va la receta!
Información Nutricional
Cada ración (generosa) de 60gr de esta tarta de yogur griego sin azúcar contiene:
96,7 kcal
7,48gr HC
Como veis, se trata de una tarta light baja en calorías, ligera y muy agradable. Si tenéis una dieta muy estricta con los hidratos de carbono, podéis sustituir la nata (crema de leche) por la misma cantidad de leche desnatada/descremada.
Ingredientes:
PARA LA BASE:, 100gr de galletas integrales sin azúcar, 10-12 moras, PARA LA MOUSSE:, 375ml de yogur griego sin azúcar, 50ml de leche desnatada, 150ml de nata (crema de leche) líquida para montar light, 1 cucharada de stevia / 2 cucharadas de sucralosa, 4 hojas de gelatina neutra
Instrucciones:
Primero prepararemos la base. Trituramos las galletas hasta que quede un polvo fino, añadimos las moras y volvemos a triturar. Para que no nos molesten las pepitas de las moras, podemos hacer el puré a parte y colarlo, o bien triturar muy bien las moras con las galletas. Como resultado, obtendremos una pasta.
Ponemos la mezcla de galletas y moras en la base de un molde desmontable (el mío es este), presionando con una lengua de gato para que quede bien compacta. Guardamos en la nevera mientras preparamos la mousse.
Hidratamos la gelatina durante unos minutos en agua fría. Calentamos la leche al micro 30 segundos, escurrimos la gelatina ya hidratada y la disolvemos en la leche, removiendo con una cucharita. Reservamos
En un bol, montamos la nata (crema de leche) con las varillas eléctricas. Añadimos el yogur y la stevia, pudiendo obtener dos texturas: 1) cremosa, integrando con la lengua de gato y movimientos envolventes, o 2) de mousse, batiéndolo todo con la batidora eléctrica. Yo he hecho esto segundo, y así he conseguido una tarta de yogur griego con una textura increíble de mousse.
Añadimos la leche con gelatina, templada, de la misma manera que hayamos hecho en el paso 4 (con lengua o batiendo), hasta que se integre bien.
Vertemos con cuidado la masa sobre la base que teníamos en el molde, y dejamos enfriar en la nevera durante 4h.
Desmoldamos con cuidado, decoramos al gusto, ¡y listo! Ya tenemos nuestra deliciosa tarta de yogur griego sin azúcar.
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