Haciendo honor a la primera tarta de zanahoria con la que empecé este blog, me he lanzado a preparar una pero con algo diferente.
Y es que en vez de llevar la cobertura de queso, esta vez está preparada con chocolate blanco, ¿qué me decís? ¿no se os hace la boca agua?
Y encima no sólo lleva esa capita por encima sino que también lo lleva de relleno, mmm...!!
A mis padres les ha encantado, sobre todo a mi madre, y eso para mí ya es un logro. Le gusta cuidarse muchísimo y no es de probar todos los dulces que entran en casa, pero en cuanto la hice no pudo resistirse a comerse un trocito, y sus palabras fueron: "Esta tarta es toda una tentación" :)
Así que he decidido subirla al blog. No pensaba hacerlo ya que el montaje fue un poco desastre.
Usé un cortador de tartas que me compré en el Ikea y ahí que nos pusimos mi padre y yo a probarlo, y casi nos cargamos el bizcocho entero!
Entre que intenté tapar los desperfectos, el relleno que se salía y las fotos que no me convencían tiré la toalla. Pero cuando la corté y probamos, ayss!
¿Cómo me la iba a comer sin dejar un recuerdo en mi blog?
Así que le dí una segunda oportunidad, esperé a la hora idónea para que las fotos salieran bien y voilà!
Y antes de que se me olvide, dedico esta tarta especialmente a Elena, del blog Elena en la cocina, quien gracias a su concurso, me obsequió con los preciosos servilleteros y cucharitas que véis en la foto. Gracias Elena :)
Espero que os guste y que disfrutéis el verano tanto como podáis :)
Receta original: www.postres.bz
Ingredientes:
Para el bizcocho:
4 zanahorias grandes (500 gr. aproximadamente)
300 gr. de azúcar moreno
300 ml. de aceite de girasol
4 huevos
250 gr. de harina integral
2 cucharadas pequeñas de levadura
1 cucharadita de esencia de vainilla
2 cucharadas pequeñas de canela
1 puñadito de sal
Para el relleno y cobertura:
250 gr. de chocolate blanco
200 gr. de mantequilla
200 gr. de azúcar glass
Para decorar:
1 paquete de almendras laminadas
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180 º. Pelamos, lavamos y cortamos en rodajas las zanahorias. Las hervimos en un cazo unos 15-20 min. aproximadamente. Las colamos y las pasamos por un triturador para que se queden echas un puré. Reservamos.
En un bol tamizamos la harina y añadimos la levadura, la canela y la sal. Mezclamos y reservamos.
En otro bol ponemos el azúcar junto con el aceite. Vamos echando los huevos de uno en uno sin dejar de remover para que se mezclen todos los ingredientes bien. Añadimos la esencia de vainilla y el puré de zanahorias.
A esta mezcla le añadiremos poco a poco los ingredientes del bol de la harina sin dejar de remover.
Cuando estén todos los ingredientes bien mezclados, preparamos el molde untado con un poco de mantequilla y vertemos sobre él la mezcla.
Horneamos 45 min. Como cada horno es diferente, os aconsejo que cuando la hora se acerque vigiléis el bizcocho para que no se queme.
Pasado el tiempo, apagamos el horno y comprobamos con un tenedor que el bizcocho esté hecho. Sacamos y dejamos enfriar.
Mientras preparamos el relleno. Para ello, batimos la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar glass. Derretimos el chocolate unos segundos en el microondas y sin dejar de batir lo vamos echando al recipiente. Metemos en la nevera mientras cortamos el bizcocho.
Para ello, podéis usar un cortador de tartas o hacerlo a mano. Dejaremos la base preparada en el plato donde vayamos a presentar la tarta y con 2/3 aproximadamente de relleno la iremos cubriendo. Colocamos la otra parte y cubrimos con lo que nos ha sobrado de relleno. Para acabar, decoramos con las almendras laminadas.
Metemos en la nevera para que coja consistencia unas horas antes de servir.