Como ya os dije hace unos meses, estoy haciendo un máster para ser profe de biología y geología (si...me he metido en una buena, lo sé jajajaja) y hace una semana he empezado con las practicas. La verdad es que me encanta, y espero aprovechar al máximo.
Lo bueno es que ahora tengo algo mas de tiempo al no tener esa montaña de trabajo que se nos iba acumulando a lo largo de la semana durante las clases...así que espero poder actualizar al menos una vez a la semana, ya que tengo unas cuantas recetas pendientes y muuuchas ideas en la cabeza.
Hoy vengo a ensenaras una tarta que hice hace poquito para un cumpleaños muy especial...un cumple con temática del espacio.
Como me pasa siempre que preparo algo mas especial, me pase muchas horas dándole vueltas a la idea aunque al final me decidí por algo sencillo y sobre todo, como era un cumple infantil, que les gustase a los mas peques.
Para no complicarme mucho con el bizcocho, y para que gustase a la mayor parte de los peques, me decidi a hacer un bizcocho con medidas de vaso muy parecido al de esta receta que os enseñe hace poquito, pero esta vez sabor mandarina...si si, mandarina!
Y el resultado final fue esta super tarta galáctica...
Si quieres ver como se prepara sigue leyendo!
Ingredientes
Para el bizcocho
1 yogur estilo griego
1 medida de aceite de oliva virgen extra
2 medidas de azúcar
3 medidas de harina de trigo
3 huevos
15g de impulsor químico (ROYAL)
1 mandarina para usar la ralladura y el zumo
1 cucharadita de esencia de vainillaPara la cobertura de la tarta:
250g de mantequilla
250g de azúcar glass
250g de queso crema
Elaboración
El bizcocho
La preparación es bien sencilla...
Separamos las claras de las yemas y batimos las claras a punto de nieve.
Añadimos las yemas y el yogur mientras batimos con las varillas de manera suave.
Incorporamos el aceite y seguimos batiendo.
Ahora añadimos el azúcar y mezclamos hasta que se integre
Añadimos la harina (tamizada) junto con la levadura, mezclando con las varillas suavemente para que nos quede esponjoso.
Por último añadimos la ralladura y el zumo de la mandarina junto con la vainilla, y mezclamos hasta que se integre todo.
Tenemos que dividir la masa en unos cuantos boles, en mi caso 4, donde añadiremos colorantes diferentes para darle color al bizcocho.
Es la hora de verter el contenido de los diferentes boles en el molde. Lo iremos vertiendo en círculos, o como mejor nos parezca de tal manera que sea un poco psicodélico, ya me entendéis ;)
En la foto podeis ver que predominan siempre los colores oscuros, así que sería buena idea añadir más cantidad de colores claros para que se note más el contraste.
Una vez que tenemos la masa en el molde, lo introducimos en el horno unos 30 minutos (varía según horno) y tenemos la base de la tarta.
La cobertura de la tarta
Ahora vamos a preparar la crema de queso y mantequilla para decorar la base que ya hemos hecho y que nos quede mucho más vistosa.
Batimos la mantequilla (que deberá estar en punto de pomada) hasta que blanquee
Ahora añadimos el azúcar glas, que bien habremos preparado o comprado ya hecho.
Por último añadimos el queso crema, que debe estar bien frío para que quede una mejor consistencia.
Y después dividiremos la crema en boles, en mi caso 4 otra vez y añadiremos el colorante, mezclandolo bien hasta que quede un color completamente homogéneo.
Decoración
Partimos el bizcocho en dos capas, y rellenamos el interior.
Colocamos la capa superior y cubrimos el bizcocho según nos parezca.
En mi caso el azul predomina bastante, pero podéis jugar como más os guste.
Y por último añadimos purpurina comestible para darle un toque aún más galáctico
Y tenemos una tarta sencilla y divertida a la vez.
A mi se me quedaron bien grabadas las caritas de asombro de los peques cuando vieron aparecer la tarta...Eso no hay quien lo pague!
Y a vosotros, ¿qué os parece la tarta? ¿La prepararías en alguna ocasión?
Si te animas a prepararla me encantaría saber que tal te ha ido!
Un besito
Y que tengáis una buena semana!!