Esta tarta la hice al principio de mi andadura con el blog, pero la verdad que no la tenía publicada, y es una tarta que no puede faltar en mi recetario.
Cierto es, que esta vez la realicé con la kitchen Aid y quedó muchísimo mejor, más esponjosa y el frosting muchísimo más fino. La máquina merece su fama...
INGREDIENTES (para una tarta de 18cm de diámetro).
para el bizcocho:
125gr de cerveza negra guinness
125gr de mantequilla
40gr de cacao en polvo sin azúcar
200gr de azúcar
100gr de crema agria
1 huevo
1 cucharadita de esencia de vainilla
125gr de harina
medio sobre de levadura química
para el frosting:
150gr de queso crema
75gr de azúcar glass
200gr de nata (crema de leche) para montar
PREPARACIÓN:
En un cazo al fuego bajo, ponemos la cerveza con la mantequilla hasta que se disuelva por completo y dejamos templar.
En el bol de la batidora, batimos la crema agria con el huevo, el azúcar y la vainilla hasta que esté complétamente integrado. A continuación, vamos añadiendo la cerveza poco a poco sin parar de batir y por último la mezcla de la harina con el cacao y la levadura bien tamizados antes de incorporar a la batidora. Depositaremos dentro de un molde engrasado y con harina espolvoreada. Metemos al horno precalentado por 30- 45 minutos a 180º con calor arriba y abajo. Ya sabéis que mi tarta al ser pequeña necesitará menos tiempo de horneado, por lo que para saber si está o no está hecha tendréis que dejar en el horno hasta que al meter el palillo salga limpio.
Preparamos el frosting mezclando el queso junto con el azúcar y reservando. Por otro lado montamos la nata (crema de leche) y la mezclamos junto con el queso y el azúcar con movimientos envolventes.
Tenéis que tener en cuenta, que esta tarta es pequeña, se puede decir que de 4 raciones más o menos, por lo que las cantidades debéis de doblarlas si queréis hacerla más grande.