Hace años, no había tanta variedad de fruta en las tiendas. como ahora que somos capaces de pagar 10 o 12 euros por un puñado de cerezas o fresas en diciembre (yo no), en lugar de comprar fruta de temporada , que es la que realmente tiene el sabor y las vitaminas. Tenemos una pijotería encima que no se puede aguantar ¡hayyyyy, si levantara cabeza nuestros abuel@s!, en más de una ocasión nos darían dos tortas para que se nos quitara tanta tontería. Y hablando de tontería.. ¿a quién se le puede ocurrir hacer una tarta del revés? La historia dice que fue un error de una de las hermanas Tatín, si eso es cierto, bendito error, porque madre miaaaaaaa , os aseguro que es una de las tartas de manzana más ricas que existen, si ya lo digo yo ( que en despistes tengo experiencia) , bienvenidos errores e improvisaciones si son tan acertados como este.
NECESITAMOS LOS SIGUIENTES INGREDIENTES:
5 o 6 manzanas, depende del tamaño, he usado golden , pero podéis poner la variedad que más os guste.
Una lámina de pasta brisa o quebrada
Un pizco de jengibre (opcional.
100 gr de azúcar.
100 gr de mantequilla
ASÍ DE FÁCIL LA PREPARAMOS:
Necesitamos para preparar la tarta un molde que sea apto tanto para poner en el fuego , como para llevar al horno, con lo cual no puede tener ninguna pieza de plástico.
Ponemos la mantequilla a derretir en el molde a fuego suave junto con un par de cucharadas de azúcar, cuando ésta empiece aderretir le añadiremos el azúcar restante.
Sin meter una cuchara OJO, ESTO ES MUY IMPORTANTE, moveremos el molde para que vaya cogiendo color el azúcar, una vez que empiece a coger tono de caramelo claro, en ese momento retiramos del fuego.
Pelamos las manzanas, les quitamos el corazón y las cortamos en cuatro partes las ponemos con la parte redonda hacia abajo.
Espolvoreamos con un pizco de jengibre (opcional)
Le pondremos una tapa y la dejaremos a fuego muy bajo durante unos 50/60 minutos moviendo el molde de vez en cuando, se tiene que hacer la manzana lentamente.
Una vez que están muy blanditas , retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Cubrimos las manzanas con la lámina de pasta, remetemos por los bordes e introducimos en el horno que tenemos previamente caliente durante 20/25 minutos (tiene que estar doradita)
La podemos comer tibia con un poco de helado , el mío era de vainilla.
Os aseguro que es una tarta deliciosa, si no la habéis probado no dudéis en hacerla, está de muerte.
¿Veis el brillo que le da el azúcar? ummmmmm, salivando estoy, ainssssssss, que poco dura lo bueno.
Bueno corazones, os deseo un fin de semana, portaros bien y si andáis con el coche cuidadín con la carretera que estos días hay muchas heladas. No os despistéis que pienso pasar lista.