A pesar de que se trata de una receta que lleva mucho tiempo de preparar, no es excesivamente complicada de hacer si ya se tiene una base culinaria media en materia de guisos. el resultado final de la receta es más o menos como puedes ver en la imagen.
Si te animas a prepararla, toma nota de los ingredientes a continuación:
1 kg de carne de ternera o buey
130 g de panceta curada
1 zanahoria
1 cebolla
500 g de cebollas francesas, lo más pequeñas posible
300 g de champiñones frescos enteros
2 dientes de ajo
440 ml de vino tinto
500 ml de caldo de carne
2 cucharadas de tomate frito
3 cucharadas de harina de trigo
2 hojas de laurel
Perejil fresco
4 cucharadas de mantequilla
4 cucharadas de aceite de oliva
Sal
Pimienta
Ponemos a calentar el horno a 210º C. Cortamos la panceta en tiras pequeñas y la salteamos en una cacerola apta para el horno con una cucharada de aceite. Retiramos la panceta bien escurrida, procurando que quede el máximo de la grasa en la cazuela y la reservamos. Volvemos a calentar la grasa hasta que vemos que echa humo.
Doramos la carne en tandas pequeñas, procurando que esté sellada por todos lados, y la vamos reservando junto con la panceta. Pelamos la cebolla y los ajos, fileteamos los ajos, cortamos la zanahoria en rodajas y picamos la cebolla y lo rehogamos en la cacerola en la que hemos hecho la carne.
Incorporamos toda la carne y salpimentamos. Espolvoreamos con la harina y removemos para que la carne se reboce un poco. Colocamos la cazuela sin la tapa en la parte media del horno. Lo dejamos cinco minutos, tras lo que lo sacamos y bajamos el horno a 150º C.
Ponemos al fuego de nuevo y añadimos el vino. Cubrimos con caldo de carne y añadimos el tomate frito, una hoja de laurel y una rama de perejil. Llevamos a ebullición, tapamos y metemos en la parte baja del horno. Dejamos que se haga durante una hora y media por lo menos, hasta que la carne esté tierna.
Glaseamos las cebollitas poniendo en un cazo ancho con tapa dos cucharadas de aceite y dos de mantequilla. Cuando vemos que empieza a burbujear metemos las cebollas y las vamos dorando por todos lados unos diez minutos, con cuidado de que no se rompan. Cubrimos con caldo, salpimentamos y le incorporamos una hoja de laurel y un poco de perejil en rama. mantenemos a fuego medio aproximadamente una hora tapado. Reservamos.
En una sartén calentamos dos cucharadas de mantequilla y una de aceite, y cuando la mantequilla esté bien fundida doramos los champiñones limpios, unos cinco minutos, y los reservamos también.
Sacamos la carne del horno y la colamos, dejando la salsa en un cazo. Volvemos a poner la carne en la cazuela y añadimos las cebollitas glaseadas y los champiñones. Reducimos la salsa del estofado y lo que queda de glasear las cebollas, retirando toda la grasa que va subiendo. Tienen que quedar unas dos o tres tazas de salsa, lo suficientemente espesa como para que se forme una película si metemos una cuchara.
Salsemamos el estofado y ponemos al fuego con la cacerola tapada, dejando que todo hierva cinco minutos más a fuego medio. Se puede servir en la misma cazuela o emplatar acompañado con patatas asadas o arroz cocido.
Os aseguro que el resultado es fantástico, sobre todo si eliges una buena carne de ternera o buey, con algo de grasa entreverada. Además, se puede preparar el día anterior y calentar al fuego un momento antes de servir, con lo que los sabores se harán más intensos.