La salsa TOFFE es absolutamente sublime. Tiene un sabor penetrante e invasivo, no te puede dejar indiferente. Si para muchos de nosotros el chocolate es el ingrediente rey en repostería, del toffe que queréis que os diga... va a la par...!!!
Es una preparación rápida y relativamente fácil de hacer.
Es un buen complemento para infinidad de postres.
En su versión más líquida se puede utilizar como salsa dulce para helados, creps y otros postres.
En su versión más espesa la podemos utilizar para rellenar tartas, cupcakes, etc.
Consejos:
Cuidado con el azúcar derretido porque quema muchísimo, es de las cosas que más quema. Sobre todo si hay niños en casa hay que vigilar porque aunque sea una receta fácil es mejor que no se acerquen mucho.
La nata (crema de leche) para cocina no sirve, debe ser nata (crema de leche) para montar pero en su estado líquido.
Al echar la nata (crema de leche) al caramelo caliente es importante apartar el cazo del fuego y tener la nata (crema de leche) tibia para que haya el menor contraste posible de temperaturas al mezclarlos pues salpica. Echaremos la nata (crema de leche) poco a poco y sin dejar de remover.
Una vez hecho lo podemos guardar en la nevera durante cuatro o cinco días o incluso un poquito más.
Una vez fría está más espesa.
Normalmente se toma frío pero también se puede comer caliente.
Aunque sea dulces puede servir para darle un toque diferente a una ensalada.
Aunque los ingredientes para el toffe sólo son dos (nata (crema de leche) y azúcar) existen varias versiones, se le puede echar mantequilla o yema de huevo al final. Hay quién hecha también la ralladura de un limón y un chorrito de licor .
INGREDIENTES para la salsa más ligera:
100 g de azúcar
150 ml de nata (crema de leche) para montar
INGREDIENTES para un toffe más consistente para rellenar :
100 g de azúcar
200 ml de nata (crema de leche) para montar
50 g de mantequilla,
ELABORACIÓN:
Calentamos un poco la nata (crema de leche) líquida en el microondas y reservamos.
En un cazo ponemos el azúcar a fuego medio y esperamos a que se derrita y forme caramelo. Veremos que primero se hacen como unos terrones blancos y después se funde y forma color. No es necesario remover el azúcar PERO YO LO HAGO SIEMPRE! no me puedo resistir... y no pasa absolutamente nada, se funde igual.
Una vez tenemos el caramelo hecho, o sea el azúcar fundido y con un color doradito (no esperemos a que se ponga muy oscuro que se quema y amarga) lo apartamos del fuego y poco a poco le echamos la nata (crema de leche) sin dejar de remover.
Llevamos de nuevo el cazo al fuego, parecerá que no nos sale porque la nata (crema de leche) va por un lado y el azúcar todo apelotonado en la cuchara...NO PASA NADA... es normal, con el calor poco a poco vuelve a fundir y se integra todo. Eso sí, no hay que dejar de remover.
Cuando veamos que adquiere una consistencia uniforme ya lo podemos sacar del fuego, aunque parezca líquido una vez frío espesa.