La tortilla de papas (patatas) o española es una de las preparaciones más clásicas de nuestra cocina, y es que parece que basta con huevo y papas para tener una en un abrir y cerrar de ojos.
Y no es que no sea así de fácil, pero es que hay tantas formas de prepararlas como cocineros y gustos.
Lo básico es lo dicho...huevos y papas, pero también acepta cebolla, perejil, chorizo, verduras como bubango y espinacas...en fin...un sinfín de variantes.
Además, fácil es, pero hasta que te sale como realmente te gusta hay que darle un par de intentos.
También hay diferentes formas según el corte de la papa. Hay quien la corta en láminas o en dados. El inconveniente de cortar la papa en dados, es que si la tortilla es muy gruesa, al cortarla se desmorona. Pero repetimos una vez más...esto es cuestión de gustos.
Hay a quien le gusta jugosa (que el huevo quede más bien crudo) o más seca, quien la toma en bocatas o como pincho..¿Seguimos?
La tortilla de hoy es básica: huevos, papas y cebolla.
1. Cortamos la papa en rodajas finas y las remojamos en agua.
2. Picamos la cebolla.
3. Ponemos aceite a calentar.
4. Escurrimos las papas y cuando el aceite esté caliente las echamos.
5. Echamos la cebolla.
6. Dejamos que las papas y la cebolla se hagan (no freír) a fuego medio.
7. Mientras tanto batir los huevos. Salar al gusto
8. Cuando las papas y cebolla estén, escurrir bien el aceite y mezclarlo todo con el huevo. Probar de sal y rectificar si es necesario.
Es importante que dejemos unos minutos que las papas se empapen bien del huevo. Si pasados estos minutitos creemos que necesitamos otro huevo para hacer la tortilla más jugosa, se lo echamos.
9. En la misma sartén donde hemos cocido las papas y la cebolla, y con el aceite que se quedó en la sartén, echamos toda la mezcla. Es muy importante bajar el fuego, para que la tortilla se haga poco a poco y no se nos queme la superficie.
10. Cuando notemos que está cuajando, es momentos de darle la vuelta. Quizás el momento más esperados de todo ;). Fundamental!!! Asegurarse de tener un plato o "algo" del tamaño suficiente.
Posiblemente este sea el paso que más tengamos que practicar para conseguir una tortilla "entera".
11. Si queremos un tortilla jugosa, cuando le demos la vuelta, subimos el fuego para sellar la superficie y listo! Si por el contrario, queremos una tortilla sequita, dejar el fuego medio para que se haga bien el huevo.
Y listo!! A picotear!
¿Y a ti, cómo es tu tortilla perfecta?
"La ignorancia y el error son manantiales del mal humor" (Paul Henri Thiry)