Hubo un día, en medio del parque de Collserola, en el que un amigo vegano me dejó con la boca abierta. Llevaba una tortilla de berenjenas para comer. De hecho a mi ya me extrañó cuando días atrás había dicho que ese día llevaría para comer tortilla de berenjenas, siendo vegano, pero pensé que sería un “vegano no estricto” y que comería huevos.
Mientras comíamos nos contó que la tortilla no llevaba huevos. Nos la dejó probar y pensé “anda ya, no va a llevar huevos esto si clarísimamente es una tortilla de toda la vida”. De textura era igual, de sabor riquísima… estaba hecha con harina de garbanzos en sustitución de los huevos. Me quedé de piedra. Nunca antes había oído que se pudieran sustituir los huevos por harina y, siendo sincera, es que en la vida había usado la harina de garbanzos para nada.
Estas tortillas veganas de verduras son un intento de hamburguesas vegetales. Estaba totalmente decidida a llamarlas así hasta que las probé. Ni por asomo tienen la textura de una hamburguesa, y eso que me basé en esta receta, que lleva por título Hamburguesa de verduras, pero ni por asomo queda una textura de hamburguesa. Más bien me recuerda a cuando de pequeña mi madre reaprovechaba la verdura hervida que había sobrado para hacer una especie de tortillas pasándola por la sartén.
Si alguien se ofrece a pasarme una receta de hamburguesa de verduras que tenga la consistencia de una hamburguesa, se lo agradeceré eternamente :)
Tortillas veganas de verduras
Para 12 minitortillas:
1 cebolla
1 calabacin
2 zanahorias
3 patatas pequeñas
3 cdas. de harina de garbanzo
comino
perejil
sal
pimienta
aceite de oliva
Pelamos las patatas, la cebolla y las zanahorias. Lavamos los calabacines y cortamos todas las verduras en daditos lo más pequeños posible (en brunoise)
En una sarten rehogamos todas las verduras con un poquito de aceite hasta que queden muy blanditas. Añadimos sal, comino, pimienta y unas ramitas de perejil picado y lo dejamos a fuego medio
Deshacemos la harina de garbanzo en un poco de agua. Tiene que quedar una textura como de huevo batido, así que iremos añadiendo el agua poco a poco hasta que quede casi líquido. Lo añadimos a la sarten de las verduras y, sin parar de remover, hasta que quede totalmente integrado. Quedará una pasta que se puede trabajar con las manos
Cuando la mezcla se haya enfriado un poco y la podamos trabajar a mano, nos enharinamos las manos y hacemos bolas como el doble de tamaño de una albóndiga. Luego las aplanamos un poco para darle forma como de hamburguesa y las pasamos por la plancha con una gotita de aceite por las dos caras.
Ya os digo, yo soy sincera con lo que preparo y lo que os enseño. En este caso iba buscando unas hamburguesas y el resultado han sido más tortillas que otra cosa, pero como de sabor estaban muy bien y a mi me han apañado ya una cena y una comida de táper, pues por qué no compartirlas? ;)
Espero que las disfrutéis!