Y como este es un blog de recetas “dedicadas”, esta vez va destinada a dos “personitas” adorables de mi familia, Alejandro y Álvaro, dos niños felices de sonrisa permanente :)
Vamos con nuestras trufas de chocolate. Para elaborarlas necesitaréis:
– 75 gr de mantequilla.
– 2 yemas de huevo.
– Unos 180 gr de leche condensada.
– 1/2 tableta de chocolate negro para fundir.
– 125 gr de almendra molida.
– Un paquete de galletas María.
– Una avellana por trufa.
– Fideos de chocolate y/o de colores, cacao, coco rayado o lo que más os guste para rebozarlas.
– Mini cápsulas de papel para trufas.
Con estas cantidades (dependiendo del tamaño que les deis) a mí me salen unas 40 trufas más o menos.
Comenzaremos mezclando muy bien la mantequilla con las dos yemas de huevo.
A continuación fundiremos el chocolate. Podéis hacerlo directamente en el microondas o en un cazo a “baño María” con medio vaso de leche.
Incorporamos el chocolate, la almendra y las galletas molidas.
Y por último añadimos la leche condensada y mezclamos todo muy bien.
Tapamos con papel film y refrigeramos un mínimo de dos horas para que la mezcla se endurezca un poco y sea más fácil de trabajar.
Y ya tenemos todo listo para dar forma a nuestras trufas. Con ayuda de un par de cucharillas vamos moldeando las bolitas, introducimos una avellana en cada una, las rebozamos en lo que más nos apetezca y las vamos colocando en las mini cápsulas para trufas.
Se conservan perfectamente en el congelador, sólo hay que sacarlas unos minutos antes de consumirlas y os garantizo que están buenísimas!
Estoy casi segura de que Alejandro y Álvaro, querrán ayudar a prepararlas. Espero que se diviertan haciéndolo y que os gusten a toda la familia :D