Receta de pan de queso o pao de queijo
Ingredientes
200 ml de leche entera
100 ml de aceite de oliva
1 cucharadita de sal
500 g de harina de tapioca (si no la encuentras, puedes utilizar harina de trigo)
3 huevos medianos
250 g de queso rallado tipo parmesano
Elaboración
Precalienta el horno a 180º con calor por arriba y por abajo.
En un cazo pon la leche junto con el aceite y la sal y calientalo a fuego medio, removiendo de vez en cuando.(1)
Retira del fuego en cuanto veas la leche burbujear.
En un bol, echa la harina y añade la mezcla del cazo. Remueve con una cuchara de madera hasta que esté todo integrado.(2)
Añade los huevos uno a uno, esperando hasta que el huevo se incorpore completamente antes de agregar el siguiente.(3)
Por último, añade el queso y mezcla bien todo.(4)
Coloca un papel sulfurizado o una base de silicona en una bandeja de horno y ve echando porciones de masa. Yo hice porciones pequeñas de unos 3-4 cm de diámetro, unas 23 porciones por bandeja.
Hornea durante 20 minutos colocando la bandeja en la parte central del horno. Tienen que haberse hinchado y estar muy ligeramente doradas.
Deja enfriar un poco sobre una rejilla, y cómetelos calientes.
Recién sacados del horno están deliciosos.
Tiempo
Elaboracion de la masa: 20 minutos
Horneado: 20 + 20 + 20 minutos (tres bandejas)
Cantidad
Depende del tamaño que las hagas. Las que yo hice eran pequeñas de unos 4 cm de diámetro y me salieron 23 + 23 + 17, total 63 panecillos. Los últimos los congelé sin hornear.
Conservación
Recién hechos es cuando más ricos están. Yo te recomiendo que hornees sólo los que te vayas a comer. Divide la masa en porciones y congélala. Cuando las quieras, sólo tienes que calentar el horno y hornearlas tal cual las sacas del congelador. Si las dejas para el día siguiente están chiclosos y no están tan ricos.
Trucos y consejos
La harina de tapioca o también harina de yuca puede ser difícil de encontrar. En grandes supermercados suelen venderla. Si no la encuentras no te preocupes, puedes hacerlas con harina de trigo.
También las he hecho mezclando queso mozzarella y queso parmesano y quedan un poco sosas, sin mucho sabor a queso. Es mejor hacerlas con un queso fuerte tipo parmesano.
Una vez horneadas, no las guardes para el día siguiente, no están muy ricas. Es mejor que las congeles y las calientes cuando te las quieras comer.
Salen muchísimas así que lo mejor, si no te las vas a comer todas, es que las congeles. Haz las porciones de masa y congélalas. Cuando las quieras consumir, tan solo tendrás que encender el horno y hornearlas.
Puedes servirlas con un poco de sal en escamas por encima.
Están deliciosas, quedan crujientes por fuera y blanditas por dentro, te las recomiendo.
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Fuente: este post proviene de chicuqui, donde puedes consultar el contenido original.
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