Fotografía PEXELS by Dmitry Zvolskiy ¿Queréis saber algo de cocina que vaya más allá de manejar el abrelatas y poner en marcha el microondas? No os asustéis, no hace falta que sepáis hacer una mayonesa casera, escalfar un huevo o saber como se corta un pollo y mucho menos hacer un demi-glace, o una masa de hojaldre. No, para la mayoría de los mortales será suficiente si empezáis con lo siguiente:
HACER UNA TORTILLA A LA FRANCESA
Esto deberían enseñarlo en el parvulario. Cascar y batir un huevo es la base y el punto de partida de muchísimas recetas. Si ya habéis conseguido batir el huevo os queda muchísimo menos para preparar una magnífica tortilla. Los huevos, claro está, son los que convierten una tortilla en una buena tortilla. Hay una diferencia abismal entre los huevos de corral o ecológicos y el resto, y cuando hablamos de una receta en la que este ingrediente es el principal ingrediente, su calidad es primordial. También debemos estar atentos a su fecha de caducidad: cuanto más frescos mejor.
Lo que diferencia a la tortilla francesa de las tortillas con otros ingredientes (patatas, cebolla, calabacín, ajos tiernos, jamón…) es que se prepara enrollando o doblando, nunca dándole la vuelta.
Se tarda un minuto en hacer una tortilla. El número ideal de huevos para la tortilla francesa es dos. Uno es poco y tres son multitud. Debéis batirlos bien, pero sin que lleguen a formar espuma para que resulte jugosa, y añadirles sal a vuestro gusto.
Una vez batidos, poned un poquito de aceite (el suficiente para que no se pegue) en una sartén, calentadla bien y echad los huevos batidos. Esperad entre 15 y 30 segundos hasta que empiece a cuajarse. En este momento, con cuidado y suavidad, id enrollando la tortilla hasta que le deis su forma tradicional. Servid de inmediato.
No, no es fácil. Si no os sale a la primera seguid intentándolo. Merece la pena.
PREPARAR UNA ENSALADA
Fotografía PEXELS Hacer una ensalada verde consiste en utilizar varios ingredientes y simplemente lavarlos, pelarlos, cortarlos, picarlos y luego juntarlos con algún aderezo. En este blog tenéis el artículo “Cómo preparar una ensalada” que os puede ayudar con la tarea.
ASAR UN FILETE, UN ENTRECOT O UN SOLOMILLO A LA PLANCHA
Fotografía PEXELS by Valeria Boltneva Si vais a gastar mucho dinero en un buen trozo de carne, no lo arruinéis cocinándolo mal. Hacer un filete, un entrecot (del francés entrecôte) o un solomillo no es difícil pero aún así mucha gente lo hace mal. Una regla de oro es calentar la plancha o la sartén donde vamos a hacer la carne lo más posible, añadiendo sólo el aceite indispensable para que no se nos pegue. Si respetamos esto, basta pasar las piezas por la sartén vuelta y vuelta, y después añadir sal. Si queréis más detalle visitad la entrada “Algunas recomendaciones para cocinar entrecot o solomillo a la plancha”
PREPARAR POLLO AL HORNO
Un pollo asado no solo deleitará vuestro paladar y satisfará vuestro apetito, además hará que vuestra casa huela increíblemente bien.
Fotografía PEXELS by Harry Dona Podéis hacer el pollo entero o cortado en trozos. Si es entero, tendréis que dejarlo más tiempo. Seguid estos pasos.
Calentad el horno a máxima potencia y dejad la rejilla en el segundo espacio desde abajo.
Colocad el pollo en una bandeja de horno y asadlo a 220º alrededor de 90 minutos. Después de los primeros 10 minutos moved el pollo con una espátula para que no se pegue a la bandeja. Según vaya soltando líquido abrid el horno y, con una cuchara, verted los jugos por encima del pollo. Recetas de pollo hay muchísimas en la red. Buscad una que os inspire confianza y ¡a por ello!
CORTAR CEBOLLA
Fotografía PEXELS Existen muchos tipos de cortes diferentes para una cebolla: en juliana, en aros y en brunoise principalmente. El corte vendrá indicado en la receta y debes hacerlo como os indique porque de lo contrario es posible que el plato no salga bien. Afectará tanto a la textura como al tiempo de cocción. Practicad con mucho cuidado, usando una buena tabla y un cuchillo afilado.
VERDURAS AL HORNO
El horno es uno de los mejores amigos de las verduras. Las verduras al horno resultan tiernas pero crujientes, con un exterior encantadoramente caramelizado. Y no hay ninguna verdura que no pueda asarse. Si queréis saber más leed en este mismo blog “Como hacer verduras al horno”.
COCER LEGUMBRES
Aprender a cocer legumbres es básico y muy sencillo. Podéis preparar platos como las lentejas o la fabada o bien utilizar las legumbres como guarnición. Para cocer las legumbres es necesario mantenerlas al menos cuatro horas a remojo (y a ser posible toda una noche.Una vez remojadas, colad las legumbres, y las ponéis en una cazuela cubiertas con agua fría. Añadid cebolla pelada partida por la mitad, uno o dientes de ajo, un par de hojas de laurel y una pizca de sal. Cocinad las legumbres a fuego medio, removiendo de vez en cuando. Cuando el agua empiece a hervir, bajad el fuego al mínimo y dejad que se cuezan entre 30 y 90 minutos, dependiendo de la legumbre. Mejor si observáis las instrucciones de cocción del paquete. Las legumbres deben permanecer siempre sumergidas en agua así que si es preciso añadid más. Cuando estén blandas retirad la cacerola del fuego y rectificad de sal. Podéis añadir un chorro de aceite. Esto sería una receta base para cocerlas. Recetas hay muchas.HACER CREMA DE VERDURAS
Saber hacer un buen puré de verduras es muy útil. Podéis aprovechar todos los restos de verduras que tengáis en el frigorífico y es un plato sencillo de preparar y nutritivo. Aunque hay purés clásicos (como el de zanahoria y patata o el de calabacín) hay una sola receta básica.
Para preparar un puré comenzad sofriendo cebolla y puerro en una cazuela, hasta que quede traslucido y después añadid cualquier verdura: calabaza, zanahoria, calabacín, coliflor, brócoli Poned sal y pimienta y dejad sofreír las verduras. Una vez que la verdura coja el sabor del puerro y la cebolla, añadid agua hasta cubrir las verduras. Cocedlo todo junto hasta que la verdura esté blanda y trituradlo todo con una batidora de brazo. Podéis añadir un poco de leche o crema si os apetece. ¡Ya tenéis preparado vuestro puré!.
PREPARAR UN CALDO
Un buen caldo en nuestra nevera nos sacará de innumerables apuros. No hay un sólo caldo; en el apartado “Caldos básicos” tenéis la receta de 4 tipos diferentes de caldo: de ternera, de pescado, de pollo y de verduras.
Lo importante es que todos los ingredientes se cocinan en frío con agua, lentamente. No hervimos el agua antes porque así el agua se impregna del sabor de los alimentos y eso es lo que queremos.
COCINAR PASTA
Una vez sepáis preparar la receta universal para cocinar pasta empezad a innovar.
Utilizad una cazuela grande/alta y poned agua suficiente para cubrir la pasta. Tened en cuenta que la pasta cuando se cuece “crece”. Poned el fuego al máximo y llevad el agua a ebullición.
En cuanto comience a hervir poned un poco de sal. Una vez pasen unos segundos echad la pasta y removed inmediatamente para que no se pegue entre sí. Mantened el fuego al máximo para que rompa a hervir con fuerza lo antes posible. Bajad el fuego después a medio-alto pero nunca al mínimo. Vigilad la pasta y comprobad el punto de cocción un par de veces. Leed el envase para ver cuánto tiempo recomiendan para que quede al dente. Los minutos que indican son los que deben pasar desde que echáis la pasta al agua hirviendo hasta que la retiráis al colador.
Tened el colador a mano en el fregadero para sacar la pasta lo más rápido posible en cuanto esté hecha. Agitad ligeramente el escurridor para pasta pero no la dejéis escurrir y secar completamente. Así no se pegará entre sí y mantendrá mejor su forma.
Servid la pasta inmediatamente con la salsa que hayáis preparado.
Fotografía PEXELS by Mali Maeder Hay muchas más cosas que podéis aprender para sentiros confortables en la cocina pero id practicando con ésta. Poco a poco, con la experiencia querréis intentar nuevas recetas e improvisar.