La preparación de este plato no tiene mucho trabajo, y es que ya veréis en los pasos como resulta muy sencillo prepararlo. Esta es de las recetas que os sorprenderán, y no solo por el sabor, sino por lo sencillo y agradecido que resulta este plato. Una receta para cualquier ocasión en la que necesitéis un plato contundente y no tengáis mucho tiempo para realizarlo.
Así que sin más, vamos a ir empezando la explicación, para que comprobéis que lo que os he contado es cierto. Vamos delantaleros, a los fogones!
Ingredientes (4 personas):
600 gr de carne picada mixta
1 diente de ajo
Perejil
1 huevo
Sal
Pimienta
Pan rallado
Harina
Aceite de oliva
1 cebolla
100 gr de beicon
1 brick de nata (crema de leche) para cocinar (200 ml)
100 ml de leche (opcional)
Preparación:
Lo primero que haremos sera pelar y picar muy finito el diente de ajo.
Seguidamente, pondremos los ingredientes para las albóndigas en una fuente (la carne, el ajo, el perejil, el huevo, sal y pimienta). Amasaremos todo bien con las manos limpias hasta que todos los ingredientes queden bien mezclados.
En este momento, añadiremos pan rallado para endurecer la masa. Es conveniente ir echando de poco en poco e ir removiendo, con el fin de no pasarnos. Cuando veamos que la masa ya se puede trabajar bien y podamos hacer bolas sin que se peguen en exceso a las manos, ya la tendremos lista.
A continuación, formaremos bolitas (el tamaño lo decidís cada uno, sin embargo, yo os recomendaría no hacerlas demasiado grandes), las pasaremos por harina y las freiremos en una sarten con un buen chorro de aceite de oliva. Las daremos la vuelta para que se hagan por todos los lados. Las iremos dejando en una fuente con papel absorbente para que se quite el exceso de aceite. Reservamos.
Picamos el beicon y en una sarten con un poco de aceite y a fuego medio, lo saltearemos. Al poco, añadiremos la nata (crema de leche) y bajaremos el fuego. Lo cocinaremos un poco mientras removemos hasta que la salsa se quede al gusto. CONSEJO: En este punto, y si queremos que la salsa se quede mas ligera y no tan espesa, verteremos la leche.
Dejaremos un par de minutos que hierva a fuego suave y añadiremos las albóndigas. Volveremos a dejar unos 5 minutos mas al fuego para que adquieran el sabor de la salsa.
Sacaremos y serviremos caliente.
¿Tenía o no tenia razón cuando os dije que era un plato muy sencillo? Pues con este plato, acompañado de una ensalada o unas patatas fritas, nosotros quedamos como unos grandes anfitriones delante de la familia. Seguro que vosotros también triunfareis al prepararlo!
Un saludo a tod@s y buen provecho!