¡Hola a tod@s!
No se si os lo he dicho alguna vez, pero no me gusta la paella. Lo confieso sin tapujos. Bueno, más que no gustar podemos decir mejor, que no me da más. Para aquellos que no sois Asturianos, quiere decir que comer la comes, pero sin gozártela. La verdad que es raro, porque me flipan todos los ingredientes por separado, menos los judiones esos enormes que nunca entenderé que aportan. A ver si algún lector Valenciano arroja luz sobre mi duda =).
Sin embargo, pierdo la cabeza por los arroces caldosos, melosos o risottos, como es el caso de la receta de hoy: arroz al pimentón con setas variadas. Yo creo que es por mi otro gran problema con este plato, y es que no hay manera de que le pille el truco.
Esa famosa indicación de: por cada tacita de arroz, dos de agua, a mi siempre me da error. No me sale. Si no falta agua, sobra arroz. Con los melosos no tengo ese problema, vas agregando caldo según te lo pide el famoso cereal y además tienen un puntito tan cremoso, mmmm, que pierdo la cabeza. ¿Vosotros tenéis la receta de arroz perfecta? ¡Revelad el secreto! Mientras tanto, ¿comenzamos?
Ingredientes...
350g. de arroz bomba (aunque podríais utilizar vuestro favorito).
200g. de setas mixtas.
1 cebolleta.
1 puerro.
2 litros de caldo de ave.
2 nueces, aproximadamente, de mantequilla.
1 cucharada de pimentón dulce.
2 cucharadas de aceite de oliva.
Queso parmesano al gusto.
Pimienta negra y sal, al gusto.
Perejil fresco, para decorar.
Con las manos en la masa...
Comenzamos picando muy fina la cebolleta y el puerro. Reservamos. A continuación, limpiamos las setas. La forma ideal para hacerlo es utilizando un paño húmedo, ya que si las sumergimos en agua pierden parte de su aroma y sabor (consejo gratis número 1 :P).
Sofreímos la cebolleta en una olla, es decir, dejamos que sude friéndola con el fuego no muy alto. Cuando esté blandita, incorporamos el puerro. Dejamos que se cocine un par de minutos más y añadimos las setas. Podéis echarlas enteras o, si son muy grandes, troceadas.
Pochamos el conjunto durante unos 5 minutos. Incorporamos el arroz y el pimentón. Salteamos hasta que el arroz tome color. De esta forma conseguimos que los granos queden bien sueltos (consejo número 2).
A continuación, vamos a ir incorporando tacitas de caldo. Es importante que esté caliente antes de añadirlo (podéis hacerlo en el microondas o en un cazo, a vuestro gusto). Añadimos una taza, dejamos que el arroz lo absorba. Cuando se haya evaporado el líquido, echamos otra taza. Así hasta que el arroz esté perfectamente cocido.
Retiramos del fuego, incorporamos la mantequilla y el parmesano rallado (al gusto). Removemos bien y salpimentamos. Queda lo mejor… ¡disfrutar!
Probad el caldo que vayáis a utilizar antes de salpimentar =) En muchos casos, es muy sabroso y casi no hace falta incorporar sal.