Y claro estaba, siendo festivo con todo cerrado, tenía que dar con la receta ideal de aprovechamiento (y nunca mejor dicho) que este tipo de situaciones requiere.
¿Y qué mejor plato que uno de arroz para sacarnos de este apuro? Con unas cuantas verduritas cocinadas que guardaba en el congelador por si acaso, improvisamos un arroz humilde pero rico rico ;)
Siempre me ha gustado el "socarraet", que es así como llamo al arroz que se queda pegado al fondo de la sartén tostado y crujiente. De hecho, en mi casa, mi hermano y yo siempre nos peleábamos por que mi madre nos pusiera en el plato la misma cantidad de este arroz, jajaja!
En este caso no me peleé con nadie, más bien hice un "Juan Palomo: Yo me lo guiso, yo me lo como". ^_^
Ingredientes:
1 pimiento verde
1 pimiento rojo
1 cebolla
1 tomate
Arroz
Aceite de oliva
Sal
Pimentón dulce
3 dientes de ajo
2 vasos de caldo de pollo
Elaboración:
Rehogamos los dientes de ajo en una sartén con un chorrito de aceite y una pizca de sal. Lavamos y picamos los pimientos y la cebolla, y las ponemos a pochar. Lavamos y rallamos el tomate y lo añadimos a la sartén. Pasados unos 20 minutos que se hayan hecho, añadimos el arroz (yo eché la medida de un vaso que siempre me sirve de referencia) con un poco de pimentón dulce y rehogamos.
Por último, echamos el caldo de pollo y dejamos cocinar unos 20 minutos aproximadamente. Cuando veais que el caldo se ha consumido apagamos y retiramos. Si queremos "socarraet", dejad un poquito más :)