La receta de hoy la he preparado con arroz integral pero podéis usar la variedad que queráis y tengáis por casa. Va bien con todos los tipos. Es una receta muy resultona y colorida si tienes invitados o también puedes hacerlo para ti y así tienes para varios días. Yo normalmente con 2 tazas tengo para comer 3 días y cada día que pasa está más bueno. Simplemente lo guardo en el frigorífico y voy sacando.
Lo he llamado arroz fusión porque en la receta uso arroz del nuestro pero con ingredientes orientales como el tamari (salsa de soja pura) y el sésamo. En España se ha usado mucho el sésamo o ajonjolí para hacer dulces pero el introducirlo en las comidas para mí ha sido un descubrimiento porque da un toque riquísimo y además aporta muchísimo calcio (más info). El anacardo es un fruto seco que proviene de Brasil mayoritariamente y tiene igualmente unas propiedades nutritivas fabulosas. Lo puedes sustituir por almendras si no tienes.
El pimiento naranja es una frikada. Podéis usar el rojo, pero cuando vi ese pimiento naranjita tan bonito en la frutería no me pude resistir. ¿Los habíais visto vosotros alguna vez? Yo estaba acostumbrada a los típicos de color verde, amarillo y rojo, pero los naranja no los conocía.
Os pongo los ingredientes que he usado pero ya sabéis que podéis modificarlos a vuestra disposición. Las cantidades son para 2 personas. Podéis doblarlas si son para 4, etc.:
INGREDIENTES:
-1 taza de arroz
- 1 pimiento naranja mediano
-1 puerro
-1 cebolla pequeña
- 1 puñado de anacardos crudos o tostados (no fritos)
- Semillas de sésamo tostadas
- AOVE (Aceite de Oliva Virgen Extra)
- 2 cdas. de Tamari (salsa de soja pura)
PREPARACIÓN:
1. Cuece el arroz según las instrucciones del fabricante.
2. Pica la cebolla, el puerro y corta el pimiento en tiras.
3. En un poco de aceite échalos en ese mismo orden en intervalos de 2-3 minutos y sofríelos hasta que estén tiernos en un wok o sartén alta. Añade 1 cucharada de tamari.
4. Añade los anacardos. Si los usas crudos como yo, haz un hueco en el centro del wok, añade una cucharadita de aceite y cuando esté caliente los echas y le das unas vueltas.
5. Añade el arroz ya cocido con otra cucharada de tamari y las semillas de sésamo. Dale unas vueltecitas para que se mezclen los sabores.
Aromático, delicioso, colorido y nutritivo, ¡no dejes de probarlo!
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Fuente: este post proviene de Crónicas Herbívoras, donde puedes consultar el contenido original.
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