Buenos días! La receta de hoy tenia muchísimas ganas de prepararla pero hasta ahora no había tenido tiempo. Me encanta hacer panes dulces caseros, quedan muy tiernos y muy ricos, además en casa vuelan! Antes de que empiece el calor de verdad quería incluir este pan en mi recetario, porque en adelante no creo que a nadie le apetezca encender el horno verdad? jejeje.
El babka es de origen judío y se prepara con una masa con levadura, trenzada y rellena de chocolate o canela. Como veréis, mi versión no se parece mucho a la tradicional, pero cuando recibí mi Degustabox y vi que traía leche de almendras no quería dejar pasar la oportunidad de probarla con esta receta, ya que va chocolatada. Siempre podéis sustituirla por leche normal pero si queréis hacer la prueba os aseguro que así queda súper rico!
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Y ahora si que si, no os hago esperar mas y os dejo con la receta. Me he inspirado en la de El gato goloso, aunque he hecho varias modificaciones. Para la masa necesitamos:
350 g harina panificable (125 g harina normal + 125 g harina de fuerza)
15 g levadura fresca
50 g azúcar
120 ml leche de almendras chocolatada Alpro Asturiana
2 huevos + 1 para pincelar
40 g mantequilla en pomada
1 c/c salPara el relleno:
100 g nueces pecanas
100 g chocolate cobertura
50 g chocolate blanco (no sale en la foto porque fue una decisión de última hora, y fue todo un acierto!)En un bol calentar la leche y disolver la levadura. Añadir la mantequilla, el azúcar, los huevos y la sal y mezclar todo bien.
Añadir la harina poco a poco a la mezcla anterior y amasar hasta obtener una masa lisa y homogénea. Formar una bola y dejar levar en el frigo toda la noche. Pasado el tiempo, sacar la masa de la nevera, dejar unos 15- 20 minutos para que se atempere y amasarla ligeramente.
La dejamos reposar hasta que doble de volumen (1 hora) y cuando esté lista estiramos hasta formar un rectángulo.
Cubrimos toda la superficie con el chocolate troceado y las nueces picadas y enrollamos. Sellamos bien las puntas y con un cuchillo afilado hacemos un corte longitudinalmente hasta el otro extremo.
Trenzamos nuestro babka y dejamos en un molde apto para horno levando hasta que vuelva a doblar de volumen (1 hora aproximadamente). Cuando haya pasado el tiempo pincelamos con cuidado la superficie con el huevo batido.
Metemos al horno precalentado a 180º durante 40 minutos. Una vez listo solo queda esperar un poco a que se enfríe (si podéis jejeje).