Obviamente recoger castañas era una excusa. La idea era hacer una ruta en bici por un paraje que tenía ganas de conocer “ El Castañar del Tiemblo”. 20.78 kms con un desnivel de 700 m… aparentemente un reto sencillo.
Era la época perfecta para disfrutar de un para precioso… el unico pero era el inconveniente de la masificación de gente que va a disfrutarlo en el momento de máximo explendor del bosque… hacia un día fantastico a pesar de ser Noviembre para pasear y recoger castañas o/y setas.
Aún así me recordó al típico bosque que se describe en los cuentos de DISNEY… siii era como un bosque de cuento, detrás de cualquier árbol podría haber salido caperucita, el lobo o la abuelita y nadie se hubiese sorprendido jijiiji
El camino de subida se me hizo muy duro porque a pesar de que hago mucho ejercicio, me he dado cuenta que hago un ejercicio extremadamente ligth. Poco cardio y mucho Hommmmmm ;) Wow, lo que para mí fue un palizón, para mi amiga Carol fue un paseo.
Me recordó a la subida al volcán Santiago en Atitlán. Mientras intentas subir crees que no vas a llegar y quieres tirar la toalla, pero cuando llegas a la cima sientes una satisfacción inmensa. Lo mucho que me costó llegar hasta él hizo que lo disfrutara como un premio tras el triunfo de conseguir el reto. Este es un resumen de aquella excursión.
Ahora si… La Receta ;)
Ingredientes para el bizcocho:
200 g de castañas
50g de leche
150 g de chocolate para fundir
Dos huevos (a temperatura ambiente)
80 g de azúcar
60 g de aceite de oliva
30 g de maicena
Para el glaseado:
120 g de chocolate fondant
50 g de agua
Una cucharadita de canela (opcional)
Elaboración
Lava las castañas, colocalas en un bol y las cubre de agua. Cocina durante 15 minutos a máxima potencia en el microondas o al baño María.
Retira las castañas del bol y dejas enfriar un par de minutos y péalas.
Tritura con 50 g de leche caliente en una batidora y reserva la crema de castañas.
Precalienta el horno a 170ºC.
En un bol, funde el chocolate en el microondas de 30 en 30 segundos a baja potencia, o al baño María, y reserva.
Separa las claras de las yemas y monta las claras a punto de nieve a mano o con ayuda de una batidora eléctrica, es decir, hasta que se forma una especie de espuma consistente que forme picos suaves.
En un bol, clarifica las yemas batiendo enérgicamente con el azúcar hasta conseguir una mezcla amarilla clara y que doble ligeramente su volumen.
Añade la crema de castañas a la mezcla, junto con el aceite y la harina de maíz y mezcla suavemente con unas varillas.
Vierte el chocolate fundido y sigue mezclando suavemente.
Finalmente incorpora las claras montadas con movimientos suaves y envolventes con ayuda de una espátula.
Vierte la mezcla en el molde enmantequillado y enharinado, y hornea 30-35 minutos o hasta que al pinchar con un palillo, éste salga limpio.
Dejamos atemperar encima de una rejilla y una vez que enfríe un poco, y que la masa se separe de las paredes, desmoldamos cuidadosamente.
En un cazo funde el chocolate con 50 g de agua y espolvorea un poco de canela (al gusto), removiendo constantemente, y a fuego bajo.
Con ayuda de una jarra vierte el glaseado de chocolate especiado.
Espero que te haya gustado la receta. Un beso desde mi mundo….
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