Día 22 de confinamiento. Por aquí no paramos de hornear bizcochos, galletas, magdalenas… y es que ahora tenemos toooodo el tiempo del mundo. Los días encerrada en casa parece que cada vez se van haciendo más llevaderos pero, aún así, me muero de ganas de disfrutar de una cenita o comida con amigos. Pero bueno, ahora es hora de colaborar y quedarse en casa para que esto acabe lo antes posible. ¡Ya tendremos tiempo de disfrutar! Eso si, en cuanto todo vuelva a la normalidad, pienso viajar a los sitios que tenía planeados ir en Semana Santa y que finalmente no va a poder ser. Londres y Zaragoza me esperan
Y para que estos días no nos pesen tanto, vamos a disfrutar de un magnífico BIZCOCHO DE ZANAHORIA. Queda muy esponjoso y la jugosidad que le aporta la zanahoria es fantástica. Para aquellos que no le gusten esta hortaliza, no dejéis de prepararlo, no le da sabor ninguno, sino que predomina el sabor de las especias. ¿Os animáis?
INGREDIENTES (molde de 18-20cm):
3 huevos L
160g de azúcar moreno (*)
200ml de aceite de girasol
200g de zanahoria rallada
Ralladura de una naranja
200g de harina
2 cdtas. de levadura química (polvo de hornear)
1 cdta. de canela en polvo
1/4 cdta. de sal
(*) en mi caso, añadí azúcar blanco normal, ya que era el único que tenía en casa.
Además de estos ingredientes, le podemos añadir 1/2 cdta. de jengibre en polvo, 1/4 cdta. de nuez moscada, 80g. de pasas picadas y 80g. de nueces picadas. Cada uno puede adaptar este bizcocho a su gusto.
ELABORACIÓN:
En un bol, batimos los huevos junto al azúcar durante 5 minutos. Tenemos que conseguir una mezcla bastante espumosa. Bajamos la velocidad de nuestra batidora y añadimos poco a poco el aceite. Seguidamente, añadimos la zanahoria y la ralladura de naranja y batimos justo hasta integrarlo todo bien. A continuación, tamizamos sobre la mezcla anterior la harina, la levadura química y la canela (en el caso de añadir más especias, incorporarlas ahora). Agregamos la sal y batimos a la mínima velocidad y justo hasta que no veamos partículas de harina. Si además queremos añadir pasas y nueces, las incorporamos en este momento y con ayuda de una espátula.
Ya tenemos la masa lista. La vertemos sobre el molde elegido previamente engrasado. Lo llevamos al horno precalentado a 180º y horneamos durante 50 minutos aproximadamente (o hasta que al introducir un palillo, éste salga limpio).
Lo sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla durante 10 minutos. Pasado el tiempo, desmoldamos y lo dejamos enfriar por completo en el mismo sitio.
¡Y ya estaría! Mirad qué pinta tiene…
Es perfecto para desayunar, merendar, como postre… a cualquier hora del día apetece
Ya sabéis, si os animáis a hacerlo, no dudéis en enseñarme el resultado a través de mis redes sociales. ¡Me encanta leeros!
¡Un besote bien grande!
Rocío