Esta es una de aquellas recetas que son muy fáciles de hacer, pero a los que no entran nunca en la cocina les parece una exquisitez, o sea que los que no sois especialmente cocinillas podéis quedar la mar de bien.
Ya veis que en verano me estoy tirando a las recetas sencillitas, es que yo no se a vosotros, pero a mi los calores me dejan desganada para meterme en la cocina.
Venga, vamos con la receta que ya me diréis que os parece (fuente de la receta: mi madre).
INGREDIENTES PARA LA MASA (20 BOLITAS):
2 patatas grandes.
200 gr de bacalao seco desalado.
2 dientes de ajo.
Perejil.
1 huevo.
INGREDIENTES PARA REBOZAR:
Harina.
Huevo.
Pan rallado.INGREDIENTES PARA FREÍR:
Aceite, yo para freír utilizo el aceite de girasol, pues, a mi parecer, le deja menos sabor. Pero podéis usar el que os guste a vosotros.ELABORACIÓN:
Ponemos las patatas a cocer en abundante agua, enteras, sin pelar.
En unos 30 minutos las pincháis, si veis que se rompen o que el pincho que utilicéis entra con facilidad ya estarán listas.
Las retiramos y dejamos que se templen. Una vez templadas les quitáis la piel, y las pasáis por un pasapuré o bien las chafáis con un tenedor.
Ponemos el huevo entero y mezclamos hasta que esté totalmente incorporado, reservamos.
Por otra parte picamos el bacalao muy pequeñito, y el ajo y el perejil. En una sartén con muy poquito aceite y fuego medio, freímos primero el ajo con el perejil un par de minutos y añadiremos el bacalao, hay que tenerlo sólo hasta que el bacalao tome un color blanco.
Retiramos del fuego y mezclamos con el puré de patatas que teníamos reservado.
Hacemos bolas con las manos y las enharinamos.
Pasaremos por huevo batido y pan rallado, y las freímos en abundante aceite muy caliente.
Dejamos escurrir en un plato con papel absorvente para que pierda el máximo aceite posible.
Espero no haberos defraudado, jeje. La verdad es que son una ricura.
Bueno, pues esto es todo por hoy, espero volver el martes, que con esto de estar de vacaciones estoy más vaga que nunca, jaja.
Un beso enorme a todas/os.