Preparamos la mesa en el jardín para que nuestros invitados se pudieran servir un té o una horchata casera bien fresquita. Tengo que decir que la cosa fue "visto y no visto" porque apenas me dió tiempo de hacer unas fotos.
Hoy os voy a dejar la receta porque además de que los ingredientes como he dicho antes se suelen tener en casa, no es nada difícil y podéis preparar la masa en lo que hacéis otras cosas.
Seguro que conocéis los bollitos de brioche, son ideales para los niños porque tienen una textura suave, son muy blanditos, suelen llevar leche y poca azucar. Os animo a que los hagáis porque les van a encantar.
Ingedientes:
- 300ml de leche tibia
- 550gr de harina
- 75 gr de mantequilla
- 100gr de azucar
- 25gr de levadura fresca
- 1 yema de huevo
- pepitas de chocolate
Preparación:
En un bol templamos la mitad de la leche y disolvemos en ella la levadura. En otro bol mezclamos el azucar con la mantequilla y la leche restante. A mi me gusta introducir la mantequilla unos segundos en el microondas para que se ponga más blandita y se mezcle mejor. Y por último en un bol más grande se mezcla el contenido de los dos anteriores y se le va añadiendo la harina poco a poco y pasada por el tamiz o por el colador.
Ahora hay que trabajar un poquito e ir amasándolo todo durante diez minutos hasta que la masa se quede elástica y no se pegue a los dedos. Lo dejamos reposar durante 1 hora tapada con un paño para que se doble su volumen.
Después, sobre una superficie limpia extendemos la masa, no hace falta enharinarla porque la masa no se debe pegar. La extendemos en forma rectangular hasta que tenga 1,5cm de grosor como máximo. Expolvoreamos las pepitas de chocolate por encima, eso al gusto de cado uno y comenzamos a enrollar la masa hasta que quede un cilindro.
A continuación con un cuchillo engrasado en aceite vamos cortando rodajitas de unos 3cm y las vamos poniendo en la bandeja del horno, hay que dejar espacio sufiente entre ellas porque van a crecer bastante más. Una vez que están en la bandeja se dejan reposar de nuevo 40 minutos y ahora si, se pintan con la yema de huevo y se dejan hornear 30 minutos con el horno a 180º por arriba y por abajo, recordad que el horno hay que precalentarlo.
Ya los tenéis, así de sencillo y cuando están calentitos y recien hechos os lo quitarán de las manos. Esta receta no es mía, la tengo mucho tiempo en mi archivo de cocina y desconozco de dónde la saqué pero bueno, lo importante es que la podamos disfrutar.
Algunas de las cositas que véis por la mesa las podéis encontrar aquí.
1/ cestito de malla. 2/ lechera con flores 3/ botella hérmetica
Fotografía My Leitmotiv