¡Hola!
Esta semana os traigo una receta súper sencilla que les encantará a todos, tanto a los peques como a los mayores; un delicioso budín de pan integral con frutos secos que hará que vuestro día comience de la mejor forma posible.
Ingredientes (para 2 raciones):
200 ml o 3/4 de taza de bebida de almendras
4 rebanadas grandes de pan integral. Yo he usado un pan que me encanta, el pan de centeno redondo de la marca Ketterer
6 claras o 3 huevos o 4 claras y 1 huevo
1 cucharadita de extracto de vainilla natural
Canela al gusto
1 pizca de nuez moscada (opcional)
1 pizca de cardamomo (opcional)
Edulcorante al gusto
1 cucharada de semillas de chía
2 cucharadas de almendra laminada (o el fruto seco que os guste)
1 puñado de arándanos rojos deshidratados Esta receta se puede hacer perfectamente con las cantidades e ingredientes que más nos gusten; si nos gusta más húmedo podemos añadirle más claras (2 más) /huevo (1) y/o leche (Unos 50 ml). Si queremos más topping, añadirle más frutos secos u otras semillas ¡Admite muchas variedades!
Primero de todo ponemos a calentar el horno a 180 grados, calor arriba y abajo. Seguidamente cortamos en cuadritos el pan integral (si son rebanadas más pequeñas lo recomendable es usar unas 6) y lo disponemos sobre una fuente apta para horno. Por otro lado mezclamos batiendo un poco la leche, las claras/huevos, vainilla, canela, el resto de las especias y el edulcorante.
Vertemos la mezcla por encima del pan, cuidando de echar el líquido por encima de todos los trozos, y dejamos reposar un minuto para que empape bien. En este punto podemos hundir un poco los trozos de la parte superior para que absorban también el líquido.
Esparcimos por encima los frutos secos y las semillas y lo llevamos al horno por unos 10-15 minutos. El tiempo aquí también dependerá de gustos y el horno de cada uno, yo lo dejé el tiempo justo para que se dorara ligeramente por arriba y cuajara el budín.
Podemos tomarlo caliente recién salido del horno con un poco de queso batido por encima o podemos dejarlo enfriar para comer al día siguiente fresquito de la nevera y tomarlo con fruta fresca. Os prometo que está DE-LI-CIO-SO
Como dije, fácil de preparar y muy rápido. Ahora solo toca disfrutarlo ¡Que aproveche!
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