Los buñuelos de bacalao no sólo son una especialidad española, también se hacen en Italia, Francia y Portugal.
Hay diferentes historias sobre su origen, por ejemplo, la que cuenta su origen andaluz. En el siglo XIII el rey Fernando III rodea Sevilla y durante el asedio, los alimentos escaseaban por lo que los musulmanes o tuvieron que utilizar los productos almacenados de que disponían, entre ellos, bacalao y harina para preparar un plato aderezado y posteriormente frito. Este nuevo plato alimenta a la población durante un tiempo, antes de que el rey conquiste la ciudad.
Además de este origen tan histórico, este plato es una manera fácil para que los más pequeños coman pescado y nos ayuden a prepararlo.
Los ingredientes para seis personas son:
Para la masa:
4 patatas
1 cebolla grande
1,5 kg lomo de bacalao desalado
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
3 ajos
1/2 cucharada de perejil
1/2 cucharadita de sal
1 huevo
Para freír:
harina
aceite de girasol
Preparación:
Hacemos las patatas en el microondas a potencia máxima durante 12 minutos.
Mientras las patatas se están haciendo, nos vamos a poner con el preparado de bacalao. Para ello, pelamos la cebolla y picamos en brunoise. Reservamos.
Limpiamos el bacalao, quitándole la piel y las espinas.
A continuación lo desmigamos. Esto lo podemos hacer con las manos.
O también podemos desmenuzarlo con ayuda de un cuchillo. Reservamos.
Echamos el aceite de oliva virgen extra en una sartén y la ponemos al fuego. Cuando el aceite esté caliente, agregamos la cebolla y la salteamos. A continuación le añadimos el bacalao y lo cocinamos.
Cuando las patatas estén listas, las sacamos del microondas y las dejamos enfriar lo suficiente para poderlas manipular.
Mientras las patatas se enfrían, pelamos y picamos muy fino el ajo.
Ahora que las patatas están menos calientes las pelamos.
Una vez peladas las machacamos con ayuda de un tenedor hasta convertirlas en puré.
Se añade el ajo picado al puré de patata.
Se agrega el preparado de bacalao con la cebolla y se mezcla todo bien.
Echamos el perejil y se vuelve a machacar la mezcla hasta que se integre bien.
Le añadimos la sal y volvemos a machacar la masa hasta que la sal quede bien mezclada.
Por último agregamos el huevo y mezclamos nuevamente machacando la masa hasta que quede homogénea.
Es una masa muy húmeda pero si vemos que es demasiado, le añadimos un poco de harina hasta que tenga la textura deseada.
Y ahora es el momento de llamar a los más pequeños para que participen en la elaboración. Vamos con nuestra cadena de montaje familiar.
Uno se encargará de repartir la masa.
Otros de hacer las bolas.
Y por último, otros se encargarán de enharinar las bolas y colocarlas en una bandeja.
Ya sólo queda freír las bolas en aceite de girasol bien caliente.
Ponemos papel de cocina sobre un plato grande o bandeja para ir colocando las bolas que vamos friendo para eliminar así el exceso de aceite antes de servirlas.
Presentación:
Colocamos en una fuente que llevaremos al centro de la mesa para que cada uno se sirva los buñuelos que desee.
Para maridarlo con un vino blanco portugués como un vinho verde para esta ocasión un en honor a mi cuñado Maxi que estuvo viviendo un tiempo en el sur de Portugal. Además, qué mejor combinación, plato de bacalao con vino portugués. ¿No creéis?
El vinho verde Casal García está elaborado con cuatro variedades de uvas, Trajadura, Loureiro, Arinto y Azal que le proporciona unas notas cítricas y afrutadas dándole frescura a este vino limpio y delicado.
Como veis, toda la familia ha participado en la elaboración de este plato, pasando un buen rato. Y además hemos comido muy pero que muy bien.
Bon appétit!!!