Para el carpaccio:
-12 gambitas. En este caso de Huelva
-Unas gotas de aceite de oliva
En primer lugar vamos a pelar las gambas pero reservando las cabezas y las pieles para hacer una salsita.
Seguidamente con la punta de un cuchillo quitamos el intestino de las gambas (es el hilito negro que va de punta a punta por la parte externa) y colocamos las gambas dándoles una forma redondeada sobre un papel film con unas gotas de aceite, pero dejando un poco de separación entre una y otra. Cubrimos con otro papel film y espalmamos. Mi forma de hacerlo es poner sobre las gambas y el papel film una tabla de cortar e ir dando golpes sobre ella hasta que queden las gambas finas. Otra forma es darles con el culo de un cazo.
Podemos guardarlo en el congelador hasta que queramos comerlo. No tendremos que sacarlo con mucha antelación porque al tener tan poco grosor enseguida se descongelará.
Para el aceite de ajo frito:
-Varios dientes de ajo
-Aceite de oliva virgen extra
-1 cayena
Pelamos y picamos finamente varios dientes de ajo, y los ponemos en una sartén con aceite de oliva virgen extra y la cayena. Calentamos a una temperatura muy suave hasta que se nos empiecen a dorar los ajos. En ese momento retiramos del fuego y tapamos para que coja más sabor el aceite mientras se enfría.
Para la salsa de gambas:
-Las cabezas y pieles de las gambas
-Un chorro de brandy
Llevamos la sartén al fuego con todas las cabezas y pieles. Vamos dando vueltas, y una vez que han cogido color flambeamos con brandy. Hay que tener cuidado con el fuego y el extractor de humos. Tenéis que apagarlo previamente para evitar accidentes.
Trituramos con la batidora y pasamos por un colador apretando bien para extraer todo el jugo. Esa será nuestra salsa. Reservarla para que se enfríe
Emplatado:
-Hebras de Chile seco
-Perejil
Ponemos el carpaccio congelado sobre el plato en el que queramos servirlo y retiramos el papel film.
Cubrimos aleatoriamente con la salsa de las cabezas y con el aceite de ajo frito.
Terminamos espolvoreando hebras de Chile seco y decoramos con unas hojas de perejil.
¡Que aproveche!