Ingredientes
Para un molde de 25 cm. de diámetro:
750 gr. de queso crema
500 gr. de nata (crema de leche) (crema de leche)
2 sobres de cuajada en polvo (o 250 gr. de yogur griego natural)
6 huevos
100 gr. de maicena
250 gr. de azúcar
Mermelada (a elegir, pero va muy bien la de fresa o frutos del bosque)
Para la base:
250 gr. de galletas digestive
150 gr. de mantequilla
125 gr. de nueces limpias
Cheesecake, mi versión casera, preparación:
La preparación del New York Cheesecake es un poco laboriosa pero nada que la paciencia no arregle. Lo primero es poner el horno con el fuego arriba y abajo a pre calentar a 180º, a continuación nos disponemos a moler la galleta junto con las nueces para conseguir la pasta que nos sirve de base. He utilizado el complemento picador de la batidora manual, si no lo tienes tendrás que utilizar el mortero y hacerlo polvo, lo más que puedas. Antes habremos fundido la mantequilla en el microondas, es mas cómodo y rápido. Le añadimos la galleta molida y mezclamos lo mejor posible, admite más mantequilla pero he querido quitarle alguna caloría, la cantidad idónea serían 50 gr. más. La ponemos en el fondo del molde y con mucho cuidado vamos extendiendo con los dedos de tal manera que en los bordes la vamos empujando hacia arriba hasta hacer una especie de molde en el que pondremos la masa líquida.
Una vez completado este paso nos disponemos a preparar la parte líquida, Batimos los huevos con el azúcar hasta ver como emulsionan y se nota como espesa y aumenta un poco de tamaño. Lo siguiente es ponerle la nata (crema de leche) líquida poco a poco y mezclar bien durante un par de minutos para que se no se quede muy líquido.
El siguiente paso ya es añadirle el queso y finalmente la maicena con la cuajada en polvo, en el caso de no disponer de la cuajada, el yogur griego lo añadiremos al mismo tiempo que el queso, esta es la única diferencia. Cuando esté todo bien batido solo nos queda ponerlo en el molde y meterlo inmediatamente al horno ya que así empieza a cuajar de inmediato, aunque pongo precalentar a 180º, me gusta ponerlo un poco más y bajarlo al meter el molde con el preparado. De primeras tuve el cheesecake 45 minutos en el horno, pero como no estaba hecha todavía, tuve dejarla 10-15 minutos más.
Esta tarta termina de cuajarse al enfriar por lo que cuando la pinchéis os puede salir húmeda la aguja, aunque nunca manchada. Como podéis ver al enfriarse, el tamaño disminuye y debéis respetar el que se enfríe bien para que termine de cuajar en la nevera, lo ideal es hacer el cheesecake de un día para otro… Solo falta ponerle la mermelada por encima y a disfrutarla…
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Fuente: este post proviene de Javier Romero: recetas de cocina familiar, donde puedes consultar el contenido original.
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