Cuando ve a aquel hombre tirado en el suelo, lleno de sangre y al bestia de su novio tirando de ella para largarse de allí, se da cuenta que todo aquello no está bien. Nada de aquello está bien
Está mal estar enamorada de un tipo que la maltrata de todas las maneras posibles. Y esa noche ya ha sido el colmo. Delante de todo el mundo. Insultos, empujones y no sabe de lo que hubiera sido capaz si aquel hombre no se hubiera metido para ayudarla
Y mira cómo ha acabado. Muerto, seguro que muerto
Llevaba una navaja encima. la próxima vez será ella
Tiene que ir a la policía, tiene que explicarles quién ha hecho aquello y que lo metan en la cárcel
A veces, se imagina cómo sería estar con alguien que no le gritara, que la valorara, que fuera amable y cariñoso. Seguramente, aquel hombre es así. Seguro que trata a su novia con respeto, como a una reina
"Qué no se muera, por favor, que no se muera"
Tiene que pedirle perdón. Hablar con él y darle las gracias. Explicarse. Decirle que ha sido todo por su culpa. Que ella, hace tiempo, lo hubiera tenido que dejar con aquel bruto
Ella odiaba la violencia. No soportaba los gritos ni las malas palabras. Por eso siempre cedía, siempre hacía lo que él quería. Llevaba tanto tiempo en esa situación, ya no sabía cómo salir. Quería decirle que tenía miedo y decirle que el miedo la hacía cobarde
Pero esta vez, haría lo correcto. Le daba igual lo que le pasara, haría lo correcto
Aquel hombre llevaba una semana en coma
Ella aún no se ha atrevido a decirle a la familia quién es. Se queda en la sala de espera y ve como los familiares van entrando a la UCI en las horas concertadas
Ya los conoce a todos. Cada día se une a sus plegarias para que él salga adelante. Los pronósticos son buenos, dicen los médicos
Ella no se había equivocado. Descubre que es un buen hombre, amigo de sus amigos, cariñoso con todo el mundo, siente pasión por su familia. Sano, deportista, trabajador, divertido
Ella hizo lo correcto. Se presentó en comisaría y les contó todo
Ahora solo le queda por hacer una sola cosa más
Dar las gracias. Por eso ruega y ruega, para que se salve
Tiene que darle las gracias porque ella se ha salvado. Ella se ha salvado y ha cambiado su vida
Pero le tiene que dar las gracias a ese hombre, tiene que acabar de hacer lo correcto por una vez en su vida
Nota: 2ª parte del relato del día 14/03, adjunto a la receta de Tarta de Santiago
INGREDIENTES
1 kg de chuletas de aguja de cerdo
2 cebollas medianas
1 puerro
2 zanahorias
1 hoja de laurel
2 tomates
100 ml de vino blanco
3 onzas de chocolate negro
1 puñado de almendras
Harina
Sal
Pimienta
Tomillo
Aceite
Agua
ELABORACIÓN
Cortar la cebolla, las zanahorias y el puerro bien pequeños
Reservar
Pelar y quitar las pepitas a los tomates. Triturar
Reservar
Hacer una picada con las almendras y el chocolate
Reservar
Salpimentar las chuletas
Enharinar ligeramente
En la cubeta poner aceite
Menú Cocina
Dorar las chuletas por tandas
Reservar
En el mismo aceite, sofreír las verduras
Añadir el laurel y el tomillo
Cuando la verdura esté blanda, añadir el tomate triturado
Cuando esté todo bien pochado, añadir el vino
Dejar que evapore el alcohol 2-3
Añadir la carne
Remover
Cubrir con agua
Cancelar menú anterior
Tapar la olla
Menú Cocina 20
Pasado el tiempo, despresurizar manualmente
Añadir la picada al guiso
Remover
Menú Cocina 8
Despresurizar manualmente
Receta adaptada de Ben remenat