Estos días soleados estamos aprovechando para comer en el jardín porque con el clima aragonés no es algo de lo que se pueda disfrutar muchas veces. O sopla el cierzo, o hace un frío que pela o un calor que achicharra. Creo que si contase los días " buenos" me saldrían incluso menos de lo que pienso.
El churrasco de ternera es ideal para prepararlo a la brasa pero como no todo el mundo tiene dónde hacer una brasa, asado al horno es una buena alternativa. Hay que tener mucho cuidado con que no quede demasiado seco, ya que es una corte fino, así que no podemos alejarnos demasiado de la cocina mientras lo preparamos.
INGREDIENTES (para 4 personas):
Churrasco de ternera: un kilo.
Patatas: 500 gramos.
Vino blanco: 150 mililitros.
Tomillo picado: una cucharadita.
Romero picado: una cucharadita.
Eneldo picado: una cucharada.
Ajo: 6 dientes.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Pimienta.
ELABORACIÓN:
Encendemos el horno a 250ºC. En un bol mezclamos el romero y el tomillo con una pizca de sal y aceite suficiente como para que cubra las hierbas.
Colocamos el churrasco en una fuente refractaria y lo pintamos con ese aceite. Lo metemos en el horno.
Asamos la carne durante 15 minutos girándola a mitad de cocción. Bajamos la temperatura del horno a 180ºC y la asamos durante una hora más. Cada 20 minutos, aproximadamente, la untamos con el jugo de la carne.
A mitad de cocción, añadimos 100 mililitros de vino.
Lavamos las patatas, las secamos y las cortamos en gajos. En una sartén calentamos un poco de aceite y ponemos las patatas y los dientes de ajo con piel.
Doramoslas patatas durante unos 5 minutos, removiendo de vez en cuando, y añadimos el vino blanco restante.
Salpimentamos, espolvoreamos con el eneldo y dejamos confitar las patatas a fuego lento unos 25 minutos (hasta que estén hechas).