Ingredientes:
5-6 cebollas
1 pimiento rojo
350gr de harina de trigo
25gr de levadura fresca
130ml de agua tibia
2 cucharadas de aceite de oliva
sal
3-4 cucharadas de pimentón dulce
Preparación:
Primero hay que tener en cuenta que las cebollas deben estar macerando desde la noche anterior, por lo que la noche antes las pelaremos y las cortaremos en juliana junto con el pimiento rojo. Lo colocamos todo en una bandeja y lo salamos generosamente. A continuación, le añadimos el pimentón dulce, de manera que quede todo bien mezclado. Lo tapamos con un paño de cocina limpio y lo vamos removiendo un par de veces. A la mañana siguiente, tendréis la cocina con un fuerte sabor a cebolla cruda, pero en cuanto metáis la coca en el horno se transformará en un olor delicioso :)
Cuando la cebolla haya macerado, empezaremos a hacer la masa. Tamizamos la harina en un bol y le añadimos la levadura disuelta en el agua tibia, junto con el aceite de oliva y una pizca de sal.
Lo amasamos todo bien durante al menos 15 min. Si tenéis una máquina de amasar lo podéis hacer ahí también. Y cuando esté, lo dejamos en el bol tapado con un trapo limpio durante una hora para que la levadura fermente.
Pasado ese tiempo, estiramos la masa hasta conseguir medio centímetro de grosor. y la colocamos con cuidado en una bandeja de horno.
Escurrimos la cebolla y el pimiento rojo para quitar todo el agua de la maceración, y lo colocamos sobre la masa repartiéndolo de manera uniforme.
Ahora, lo metemos en el horno precalentado a 180-200ºC durante unos 30 minutos. La temperatura y el tiempo varían en función del horno, así que cuando veamos que algunas puntas de la cebolla empiezan a quemarse y que la masa empieza a dorarse, ya podemos retirar nuestra coca del horno. ¡Buenísima! :)