Si vais a recibir a gente en casa estas Navidades y sois muchos, (¡socorro! muchísimos) puede sonar divertido pero resulta abrumador, máxime si sois de esas personas que entran fácilmente en modo “pánico” y se atemorizan con los ¿y si? (¿Qué pasa si falta comida?, ¡Qué pasa si a alguien no le gusta el plato principal? … ).
Bromas aparte, preparar una comida para más de 6 invitados (no digamos más de 10 o 15) aumenta el nivel de stress. En esta situación la planificación es clave para minimizar el nivel de ansiedad y si no estáis relajados vuestros invitados pueden sentirse incómodos
6 CLAVES PARA QUE TODO OS VAYA MEJOR
1. No os arriesguéis con nuevas recetas
Preparad aquéllo que sabéis que hacéis bien porque ya lo habéis cocinado con anterioridad. Lo mejor es que os decidáis a preparar algo que (¡casi!) podáis cocinar con los ojos cerrados. Experimentar con nuevos platos o recetas complicadas aumenta las posibilidades de problemas. Si queréis deslumbrar a los invitados con algo nuevo, probad con un aperitivo pero no con el plato principal.
2. Mejor menús tradicionales
Procurad que vuestro menú se adapte a todos los gustos. No incluyáis productos muy innovadores o recetas muy modernas. Si tenéis gente mayor preferirán la cocina más clásica y los niños recetas no demasiado elaboradas.
3. Pensad en platos que se puedan preparar por adelantado
¿Qué ocurre si tenéis que prepararlo todo el día de la comida? Pues que estaréis nerviosos y demasiado pendientes de la cocina. Elegid platos que sólo tengáis que precalentar justo antes de comer y mejor que cuando llegue la gente tengas la cocina limpia, o casi. Socializar es difícil cuando tenéis que estar al lado del fogón con tus invitados esperando.
4. Preparad suficiente cantidad de comida
La cantidad variará según vuestros invitados (¿solo para adultos? ¿hay niños?) Calculadlo bien para que no falte ni sobre en exceso.
5. ¡Haced trampa!
Ganad tiempo (y espacio en el fogón y el horno) comprando algunos artículos prefabricados (¡no lo contaré!). La mayoría de las cocinas de una casa normal no tienen el suficiente espacio para grandes preparaciones, por lo que comprar ensaladas ya preparadas, algo de charcutería o una guarnición ya preparada ¡o un magnífico postre!, os permitirá un respiro.
Un poco de ayuda hará que os sintáis menos agobiados.
6. Organización, organización y organización
Desde los platos hasta los ingredientes, los utensilios, las bebidas, la decoración de la mesa … haced listas de todo lo que necesitareis. Anticipad todo lo que podáis anticipar. Es fundamental que todo lo penséis y preparéis con antelación, cuando todo tiene solución y se está a tiempo de lavar y planchar el mantel. El día antes ya deberéis tener preparado el mantel, vajilla, copas, vasos y cubiertos que vais a utilizar porque ¡os vais a dejar la mesa preparada antes de ir a dormir!. Dejad para el día de la comida únicamente lo que no tengáis más remedio que preparar ese día.
Porque una Navidad estresados, malhumorados y con la lengua fuera no es recomendable haced todo lo posible para evitarlo.
Mantened la calma.