Si te gustan las mermeladasy quieres prepararlas tú mismo este post, si no estás muy puesto en la materia te será de utilidad.
Prepararlas es muy sencillo y de esta manera estarás disfrutando de un alimento con más sabor y cero aditivos y conservantes.
En primer lugar te aconsejo que prepares tus mermeladas con fruta de temporada, de esta manera también te saldrán más económicas.
La fruta que elijas no debe de estar ni muy verde ni muy madura, lo mejor es que este en su punto. Si esta verde contiene menor cantidad de pectina lo que dará como resultado mermeladas poco espesas y difíciles de utilizar.
Desecha siempre la fruta excesivamente dañada, ya que con ella será muy probable que la mermelada se estropee.
Te aconsejo dejar macerar durante varias horas la fruta junto con el azúcar, para que cuando empiece a cocer la mermelada, el azúcar ya esté totalmente disuelto en el líquido que la fruta haya soltado.
El azúcar es un elemento fundamental en la elaboración de mermeladas ya que actúa como conservante, por eso añade siempre la medida exacta.
Lo ideal es añadir por cada kilo de fruta de 700 gramos a 1000 gramos de azúcar. Si quitas azúcar te saldrá una mermelada más liquida por lo que tendrás que echar algún espesante como gelatina o agar-agar.
Y recuerda añadir el azúcar al principio, si añades más después de la cocción, el resultado no es el mismo.
Para su elaboración elije una cazuela amplia, ya que al añadirle el azúcar la fruta suelta gran cantidad de agua y podría salirse al cocer.
Siempre viene bien echar un chorro de zumo de limón antes de comenzar la cocción de la fruta con el azúcar, ya que la acción antioxidante del limón ayudará a una mejor conservación de la mermelada y, además, servirá para ligar la fruta con el azúcar.
Para saber si la mermelada está hecha podemos poner un poco de ella en un plato que previamente hayamos metido en el congelador. Si en pocos segundos ya se ha espesado, será señal de que ya está terminada, si no es así, la ponemos un poco más al fuego y listo.
Si haces cantidad de mermelada la puedes guardar en tarros de cristal cociéndolos al baño maría. De esta manera tus mermeladas se conservarán en perfecto estado en la despensa en un lugar fresco y seco durante más de un año.
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