Es cierto que el desayuno británico por antonomasia es el “Full English Breakfast” pero hoy en día, excepto en fin de semana o vacaciones, no se tiene demasiado tiempo para huevos fritos con salchichas y beicon, judías en salsa de tomate, champiñones, pan frito, etc.
El desayuno diario es más ligero y la mermelada de naranja amarga, sobre pan tostado, es la preferida. A los británicos les gusta tanto esta mermelada que, desde hace 10 años, anualmente celebran el Festival Internacional de Dalmain en Cumbria, situada al norte de Inglaterra. En este festival participan fabricantes de esta mermelada de diferentes países.
La palabra ‘Marmalade’ viene del portugués para membrillo en conserva, o ‘marmelo’. Es naranja conservada con azúcar, agua y cáscaras de cítricos. La tradición marca que se prepare con naranjas sevillanas, pero actualmente también se hace de limones, pomelos, kumquats, naranjas dulces, o cualquier cítrico.
Existen diversas teorías sobre el origen de la mermelada de naranja , pero hay constancia de que en Escocia, en el siglo XVIII, Janet Keiller inventó la que hoy es la fórmula de esta mermelada. Su esposo, comerciante, compró una gran cantidad de naranjas de Sevilla y esas naranjas eran tan amargas que no pudo venderlas, pero Janet supo aprovecharlas al convertirlas en una extraordinaria mermelada que más de doscientos años después sigue haciendo las delicias de todos los incondicionales de este tipo de mermelada.
En muchos países, como en España, no diferenciamos entre mermeladas y confituras pero hay diferencias tanto en la elaboración de cada una como en la textura que se consigue al final. Los ingleses sí lo distinguen: Marmalade y preserves o jam.
Mermelada. La mermelada se suele elaborar con trozos de frutas enteras, aunque también puede utilizarse fruta troceada o triturada, y azúcar. El contenido mínimo de una mermelada es del 30% de fruta.
Confitura. Para elaborar la confitura se utiliza azúcar, agua y fruta. Normalmente, en la confitura se suele utilizar la pulpa natural de una o varias frutas. El contenido mínimo de una confitura es de un 35% de fruta y su textura suele ser gelatinosa.
Os dejo a continuación una receta de mermelada inglesa de naranja amarga muy fácil de preparar. La mermelada de naranja amarga más popular en el Reino Unido es la que se prepara con naranjas de Sevilla, una variedad más amarga y con un alto contenido en pectina que favorece su textura final. Podéis, no obstante, utilizar otro tipo de naranja que tengáis a mano (si es dulce no será amarga la mermelada “of course”). La elaboración de la mermelada es sencilla pero os llevará tiempo, así que hay que asegurarse de disponer de unas horas en casa para poder estar al tanto del proceso.
Ingredientes
2 kilos de naranjas amargas muy bien lavadas en agua fría
1 kilo de azúcar
1,7 litros de agua
Preparación
Necesitaréis unos 8 frascos de cristal esterilizados donde guardar la mermelada una vez hecha.
Exprimid el zumo de las naranjas en una cacerola y cortad la cáscara como en la foto.
Mezclad el zumo con la cáscara triturada y añadid el agua. Dejad reposar unas 12 horas para extraer toda la pectina de la fruta y suavizar la piel.
Poned la cacerola a fuego lento durante unas 3 horas. Añadid el azúcar y seguid calentando y moviendo para que el azúcar se disuelva completamente. Una vez disuelto, subid el fuego hasta que hierva durante 10 minutos.
Dejad enfriar y ya la tenéis hecha. Guardadla en los frascos preparados al efecto y cerradlos inmediatamente. Podéis conservarlos en un lugar seco y oscuro durante 12 meses.