Partiendo de los ingredientes de la sopa de castañas de la tía de Argi, vamos preparar una crema que no te dejará indiferente, ¿me acompañas a la cocina?
Los ingredientes que vamos a necesitar para cuatro o seis personas son:
Para la sopa:
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 cebolla
300 g de setas
600 g de castañas cocidas
1 litro de caldo de cebolla
1 clavo (Opcional)
sal
pimienta (Opcional)
Para presentación:
200 g de setas
3 ajos
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
sal
pimienta
El aceite de oliva virgen extra se puede sustituir por aceite de coco o mantequilla, aunque la mantequilla le da más cremosidad a la receta.
El caldo de cebolla lo podemos sustituir por caldo de verduras y, para los no vegetarianos ni veganos, por caldo de pollo. Nosotros vamos a utilizar el caldo ecológico que me recomendó y regaló Aneto Natural en la pasada edición de Biocultura.
Preparación:
Lo primero que vamos a hacer es preparar las castañas. Si las vamos a utilizar frescas, precalentamos el horno a 200ºC. Hacemos un corte en forma de cruz en un lateral de las castañas, con ayuda de un cuchillo, para que sea más fácil pelarlas. Las vamos colocando sobre una bandeja de horno. Una vez estén todas listas, se meten al horno y se hornean durante 15 o 20 minutos. Transcurrido este tiempo, se sacan del horno y, cuando se puedan coger, les quitamos la piel con cuidado, ya que están aún muy calientes.
Si vamos a utilizar castañas pilongas, la tía de Argi las cuece en leche para ablandarlas.
Y, por último, si vamos a utilizar castañas ya cocidas, lo único que tenemos que hacer es sacarlas del recipiente donde vienen envasadas.
Sea cual sea la opción elegida, cortamos las castañas en trozos regulares y reservamos.
Ahora nos ponemos con las setas, las limpiamos con mucho cuidado y las cortamos en trozos del mismo tamaño en que hemos cortado las castañas y reservamos.
Pelamos y cortamos la cebolla en brunoise. Ponemos una olla al fuego con el aove. Una vez el aceite esté caliente, añadimos la cebolla y sofreímos. Cuando la cebolla haya cambiado de color y se vuelva translúcida, agregamos las setas y las castañas y cocinamos durante unos minutos, hasta que las setas adquieran un tono más oscuro.
Vertemos el caldo, añadimos el clavo y llevamos a ebullición. Dejamos cocinar hasta que las setas estén tiernas y las castañas se deshagan con solo tocarlas, unos 20 minutos.
Mientras la sopa se está haciendo, preparamos la guarnición, para ello, limpiamos las setas con cuidado y las cortamos en trozos pequeños. Tenemos que tener en cuenta que se va a utilizar para la presentación del plato. Pelamos los ajos y los colocamos en un prensa ajos. Otra opción es cortar el ajo en láminas finas, depende del gusto de cada uno si queremos que se vea el ajo o no.
En una sartén, vertemos un chorreoncito de aceite de oliva virgen extra y ponemos al fuego. Cuando el aceite esté caliente, añadimos las setas y el ajo y cocinamos. Una vez las setas estén a punto, salpimentamos al gusto.
Una vez transcurridos los 20 minutos, apartamos la olla del fuego y batimos con ayuda de una batidora o procesador de alimentos.
Pasamos por un chino o colador, para que la crema sea lo más suave posible pasándola a una nueva olla que ponemos al fuego. Salpimentamos y calentamos.
Presentación:
Servimos en unos cuencos o boles y decoramos con setas salteadas y espolvoreamos un poco de perejil.
Podemos utilizar platos iguales, aunque queda más divertida y original si utilizamos boles o tazas... de diferentes modelos y colores, verás como la mesa queda más colorida y bonita.
¿Qué os ha parecido este plato para una comida de Navidad? Si aún no has probado la combinación de castañas y setas, te recomiendo que pruebes esta crema, elaborada con productos de temporada qué más deliciosa y saludable no puede ser. ¡Te va a encantar!
Bon appétit!