Pero está muy buena, incluso si no te gusta la coliflor, o también la podemos llamar falsa crema de calabaza, que es lo que parece.
Para mí invierno es sinónimo de cremas y sopas {bueno también de bizcochos para que os voy a engañar} así que tan pronto empieza el frequito yo empiezo a hacer cremas de todo lo que se me ocurre o tengo en la nevera. Por ejemplo algo que hago si o si el domingo, es una mega crema con varias verduras, las meto en tupers pequeños que dan para un plato hondo y a la nevera. Son mis cenas de toda la semana, no me importa repetir cada noche porque es el primero al que después acompaño con alguna proteína {tortilla francesa, queso fresco, yogurt, salmón a la plancha...} y me queda una cena equilibrada, sana y ligera
Rehogamos cebolla y ajo, añadimos una cucharada de pasta de tomate frito, [tomate concentrado] una coliflor a trozos, sal, pimienta, una patata grande pelada y cortada en trocitos, un trozo de cúrcuma rallada [o en polvo media cucharadita] y cubrimos con agua o caldo de pollo.
Hervimos hasta que esté blanda la patata y batimos con la batidora. Listo! ya solo queda coronar con unos picatostes al gusto.
Por cierto, para montar la mesa he usado por supuesto manteles de La pajarita y ¿habéis visto que elegante puede quedar la mesa con estos salvamanteles? En este caso he usado un mantel de papel de la gama hilos , junto con su servilleta canguro a juego y otro debajo combinándolo que me parece divino mantel individual nature de tejido no tejido este en concreto con piedrecitas redondas. Mirad en la página de La pajarita porque os va a sorprender la gama tan amplia que tienen y que sepáis además que son personalizables y biodegradables, darán un toque especial a tu mesa.
Fuente: este post proviene de Un poquito de Rocío, donde puedes consultar el contenido original.
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