Para ello nos vamos a basar en la receta "Crema de jengibre y zanahoria" que viene en el libro "En boca de todos" de Juan Llorca y Melisa Gómez y la editorial Vergara. Se trata de un libro en el que sus autores resuelven dudas frecuentes que suelen surgir sobre la alimentación de los más pequeños después de su primer cumpleaños.
Se trata de una receta vegana, sin gluten y sin lactosa que es ideal para la dieta de los más pequeños de la casa.
Los ingredientes que vamos a necesitar para elaborar mi versión de esta receta son:
Para la crema:
2 ajos
2 cebollas
500 g de zanahorias
2 patatas
2 cucharaditas de jengibre
3 tazas de caldo
1/2 cucharada de garam masala
1/2 cucharada de comino molido
sal
pimienta
Para la presentación:
crema agria
comino
Si no tienes garam masala, en este post te explico cómo la hago yo. En mi cocina nunca puede faltar.
Esta receta vegana pasará a ser vegetariana si utilizamos crême fraîche para decorar o suavizar nuestros platos.
Preparación:
Lo primero que vamos a hacer es preparar tanto los ingredientes como los utensilios que vamos a necesitar. Colocamos una cocotte sobre la vitrocerámica. Pelamos y picamos el ajo y reservamos. Pelamos y cortamos la cebolla en juliana. Pelamos y cortamos las patatas en trozos no muy pequeños. Cortamos la zanahoria en rodajas. Pelamos y rallamos el jengibre.
Vertemos el aceite en la cocotte, añadimos el ajo y cocinamos. Cuando comience a dorarse, agregamos la cebolla y pochamos a fuego medio.
Añadimos las especias, las zanahorias, las patatas, el caldo y salpimentamos. Llevamos a ebullición y cocinamos a fuego medio hasta que las zanahorias y las patatas estén tiernas (30 minutos). Viendo si tiene mucho caldo o por lo contrario necesita más caldo o agua.
Antes de triturarla le he quitado 1/2 taza de caldo para que Ma Petite Chloé pueda comerla mejor. Trituramos con un robot de cocina o batidora, pasamos por un colador, si lo vemos conveniente, y listo. Tendremos una rica y reconstituyente crema de zanahorias y jengibre.
Presentación:
Servimos en unos platos hondos o boles. Para nosotros vamos a terminar decorando los platos rociando un poco de crême fraîche y espolvoreando un poco de comino.
El jengibre le da un sabor fuerte que he pensado que a Ma Petite Chloé no le va a gustar así que lo he suavizado con un poco de crema agria y le ha encantado. De hecho, ha repetido.
¿Qué te parece esta receta? Más fácil de hacer no puede ser, además, es ideal para toda la familia. El garam masala y el comino le aportan ese toque oriental que la hace tan especial.
Bon appétit!