Para 2 litros (6-8 personas):
-800 g. de langostinos pequeños
-1 ó 2 dientes de ajo
-1 puerro grande picado
-500 g. de zanahorias en rodajas
-1/2 vaso de tomate rallado
-1 vasito de coñac
-1 litro de agua (aproximádamente)
-pimienta molida
-aceite de oliva virgen y sal
-a elegir:
1 cucharadita de maizena diluida en una tacita de agua fría,
1 brick pequeño de leche evaporada,
1 brick pequeño de nata (crema de leche) para cocinar,
1/2 cucharadita de agar-agar en polvo diluida en agua fría (lo encontré en Carrefour)
En una olla grande, doramos el ajo. Añadimos el puerro y rehogamos a fuego lento. Incorporamos las zanahorias y tras 5 minutos, los langostinos.
Mientras los vamos aplastando, dejamos que se doren sus jugos, pero con cuidado de no quemarlos. Flambeamos con el coñac (apagando el extractor) y agregamos el tomate.
Cuando el tomate esté reducido casi por completo, cubrimos todo con agua y cocemos 15 minutos. Trituramos y pasamos por el chino. Salpimentamos.
Así nos queda una crema fina, pero con mucho sabor. Si no nos gusta demasiado el marisco, como es mi caso, la podemos rebajar con la leche evaporada o la nata (crema de leche), que además le aportará melosidad.
Si queremos que quede menos suave, le añadimos la maizena diluida, que no le rebaja el sabor y la espesa lo justo.
Si utilizamos el agar-agar, procedemos como con la maizena, pero sin que llegue a hervir, pues desaparece el efecto espesante en caliente (espesaría en frío). Simplemente lo añadimos diluido y calentamos un par de minutos, removiendo la crema.
Se puede congelar sin nata (crema de leche)/leche/agar-agar y espesarla, cuando la calentemos.
Podemos acompañar la crema con langostinos enteros o pelados (salteados o cocidos), con picatostes, con alguna masa horneada (pasta brick a las finas hierbas, estrellas de hojaldre,...) y decorar con un poco de nata (crema de leche).
Nutrición: langostinos, puerros, zanahorias, agar-agar.