El puré de lentejas o crema de lentejas me lleva a la infancia. Hubo unos días en los que mi tío Francisco se quedó a cuidarnos y nos preparó una crema de lentejas deliciosa, fue la primera vez que mis hermanos no protestaron por comer legumbres. A partir de entonces, cada vez que mi madre hacía lentejas, se las tenía que batir y servírselas en puré.
Para ello nos vamos a basar en una de las recetas que ofrece la aplicación Lifesum, de la que ya os he hablado en otros posts.
Los ingredientes que vamos a a necesitar para hacer mi versión de esta receta para seis personas son los siguientes:
Para la crema:
800 g de lentejas
800 g de salsa de tomate
1 l de caldo
1 cucharadita de sal
1/4 de cucharadita de pimienta negra molida
Para decorar:
1 yogur
pipas de calabaza
perejil
La salsa de tomate que vamos a añadir a la olla es tomate triturado ecológico que podemos sustituir por cualquier otra salsa de tomate.
En la receta original se utiliza agua pero nosotros vamos a utilizar caldo natural de verduras de cultivo ecológico Aneto que va a aportar más sabor y aroma a nuestra receta.
Nosotros vamos a utilizar yogur natural ecológico aunque la receta original sugiera decorar con yogur vegetal.
Preparación:
Lavamos las lentejas con abundante agua y las escurrimos bien. Las introducimos en una olla y añadimos la salsa de tomate, el caldo, la sal y la pimienta. Removemos bien y llevamos a ebullición. Dejamos hervir a fuego medio bajo durante 15 minutos, removiendo de vez en cuando.
Apartamos del fuego y trituramos con una batidora de mano. Probamos y rectificamos de sal y pimienta, o también podemos añadir un poco de vinagre que siempre va muy bien con las lentejas.
Ponemos al fuego nuevamente, si es necesario, para que esté a la temperatura deseada a la hora de servir.
Presentación:
Servimos en cuencos o boles, rociamos un poco de yogur por encima, decoramos con unas semillas de calabaza y espolvoreamos un poco de perejil.
¿Qué te parece esta crema de legumbres? A nosotros nos encanta y nos transporta a nuestra infancia reconfortándonos aún más, dándole un toque de color a los días grises invernales.
Bon appétit!