Los viajes siempre cansan y así que cuando Monsieur Accidents volvió a casa, pensé en llevarle el desayuno a la cama.
En ocasiones, nos gusta dejarnos mensajes, aunque hace tiempo que no lo hacemos, por eso me llevé una muy grata sorpresa cuando, al ir a acostarme la noche que se fue de viaje, me encontré con una nota, en mi lado de la cama, en el que ponía: "Te quiero Princesa. Que tengas dulces y felices sueños".
Para preparar este delicioso desayuno he necesitado lo siguiente:
Una taza con café
Un plato de Ikea
Un cupcake de tiramisú
Una jarrita de la tienda Muy Mucho con azúcar glacé
Una jarrita de la tienda Casa con sirope de café
Una servilleta de papel Bon appétit de Maisons du Monde
Una cucharita de Ikea
Una bandeja de Maisons du Monde
Lo primero que hice fue el café. No sé como Monsieur Accidents no se despertó con el aroma del café que desprendía la cafetera. El café italiano es de sabor y aroma intensos, como el Café Segafredo que viene en la caja Degustabox de enero.
Luego preparé la bandeja, coloqué la taza con el café, la jarrita con el sirope, el recipiente con el azúcar glacé, el plato con el cupcake de tiramisú, la servilleta y la cuchara. Y se lo llevé a la cama.
A veces, cosas sencillas como dejar un mensaje o preparar un delicioso desayuno y llevarlo a la cama, son pequeños accidentes que hacen que la vida se saboreé mejor...
Bon appétit!