Escalivada Exprés
¡Hace un par de semanas este blog cumplió su primer añito de vida y no podría estar más contenta! Aunque soy consciente de que últimamente no le dedico todo el tiempo que me gustaría a la cocina, quiero que sepáis que pongo todo el amor en cada recetita que preparo para compartiros y que las disfrutéis.
Este primer año de vida de blog ha sido bastante movido y, si me sigues desde hace tiempo, sabrás que pasé de tener más o menos una estabilidad a hacer las maletas y marcharme con la casa a cuestas de interina a un piso de alquiler donde, obviamente, no podía llevarme todos mis “cacharros” de cocina y donde he estado demasiado liada con el trabajo.
Con el verano, las cosas no se han asentado tanto como me hubiese gustado, ya que antes de colocar mis cosas he tenido que liarme con limpiezas para hacer sitio a lo que traía, etc.
Pero bueno, eso siempre lo he tenido en mente: este blog lo hice como una afición y para compartir lo muchísimo que me apasiona la cocina. Habrá temporadas que pueda publicar mucho más y otras que esté más ausente, ya que la vida a veces no te da muchos respiros. Lo importante es ponerle toda la pasión en lo que haces y eso lo hago con mucho gusto para poder compartiros recetitas fáciles, riquísimas y sanotas.
Ya sabéis que aquí en La Mancha los veranos ya son lo suficientemente calentitos como para añadirle un plus encendiendo el horno, así que, en los meses estivales intento estar lo más alejada de él siempre que sea posible, claro, -que no renuncio yo a una señora pizza casera tan fácilmente-.
Esta vez me pedía el cuerpo una recetita fresquita y ligera y me decidí a preparar una escalivada de verduras que, he llamado exprés porque no se tarda prácticamente nada en preparar y está buenísima.
Aunque en esta receta he optado por un bote de pimiento morrón que tenía por casa, podéis utilizar pimiento rojo o de colores cocinándolos previamente al micro como haremos con el resto de las verduras.
Y sin más dilaciones, vamos a ver la receta tan rica de esta escalivada que, la podéis comer tal cual, en una tosta o, como hice yo, con una pizza riquísima.
Coge papel y boli y, ¡al lío!
Ingredientes (4 raciones):
1 berenjena mediana
1 cebolla morada (puedes usar cebolla normal también)
1/2 bote de pimiento morrón
Sal
Ajo en polvo
Aceite de oliva virgen extra
Procedimiento:
Primero, lava bien la berenjena y corta la parte del tallo. Con ayuda de un tenedor o un cuchillo, pincha la berenjena para que se cocine bien por dentro y no explote.
Mete la berenjena en un cuenco de cristal o resistente al calor y ponlo en el microondas con la tapadera para que se haga al vapor con su propia agua. En mi caso, puse la berenjena a máxima potencia (900W) durante 6 minutos y estaba blandita al sacarla. Si después de un tiempo ves que al pincharla aún sigue dura, sigue cocinando en intervalos de 1 minuto hasta que esté blandita cuando la pinches.
Repite el procedimiento con la cebolla previamente pelada. En este caso fueron 4 minutos al micro.
En caso de que utilices pimientos frescos, lávalos, quítales el tallo y las semillas y ponlos en el microondas unos 3 o 4 minutos o hasta que estén cocinados.
Deja que se enfríen las verduras para no quemarte al partirlas y, cuando hayan atemperado, con ayuda de un cuchillo afilado corta en láminas la berenjena, la cebolla y, si es tu caso, el pimiento.
Si usas pimiento morrón como yo, simplemente escurre la mitad del bote y ponlo en un cuenco donde añadiremos la berenjena y la cebolla cortada.
Agrega un poquito de sal y ajo en polvo (al gusto) y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
Remueve todo bien y ya estaría lista nuestra escalivada exprés.
Puedes comerla aún caliente o guardarla en el frigorífico y degustar después en una tostada cuando esté bien fresquita, añadir un poco a tus ensaladas, etc.