El falafel es una de las recetas más populares de Medio Oriente. Se trata de una albóndiga de pasta de garbanzo o haba muy especiada que se sirve sola o dentro de un pan pita y que es originaria de algún lugar del subcontinente indio.
Esta receta es muy fácil y puede hacerse mucha cantidad y congelar. ¡No se la pierdan! Un plato sabroso, vegano y muy sano.
Ingredientes (para unos 25 falafel achatados): 400 g. de garbanzos + 3 cebollas grandes + 1/2 taza de perejil picado + 1/2 taza de cilantro picado + 3 dientes de ajo + 2 cucharaditas de sal + 1 cucharadita de pimienta de Jamaica o Cayena molida + 1 cucharadita de comino molido + 2 cucharaditas de levadura en polvo + 1/2 taza de pan rallado (o menos) + 1/2 taza de harina (o menos).
Comenzamos el proceso 1 a 2 días antes, dejando los garbanzos en abundante agua potable para que se hidraten.
En el momento de preparar el falafel usamos una procesadora. Picamos primero la cebolla con el ajo, el perejil y el cilantro y reservamos.
A continuación procesamos los garbanzos en crudo (hidratados y colados), en general de a poco para no forzar la máquina, hasta que queden con una textura similar a la foto.
Mezclamos ambas preparaciones, añadimos harina y pan rallado y condimentamos. Las cantidades de harina y pan rallado pueden variar de acuerdo a la humedad de la masa, si la masa se arma bien no es necesario agregar esa cantidad, puede ser menos. Luego armamos con la mano croquetas achatadas (son más fáciles de freír).
Congelado: Podemos congelar el falafel crudo, sobre placas, en lo posible flexibles. Un truco: podemos usar tapas de táperes grandes. Una vez freezados colocamos los falafel en una bolsa, etiquetamos y guardamos en el mismo freezer.
Cocción: En una sartén con abundante aceite neutro, freímos las croquetas de ambos lados hasta que estén doradas. El interior debe quedar cocido pero húmedo.
¿Cómo servir? Una forma tradicional (y deliciosa) es servir el falafel dentro de un pan pita, también llamado pan árabe, acompañado con cebolla cruda, tomate, lechuga y salsa de yogur natural. La salsa se hace muy fácil mezclando yogur sin sabor, aceite de oliva, jugo de limón, sal y pimienta. Opcional: un poco de ajo.
¡Que la disfruten!