Crêpes de harina de trigo sarraceno, la cena perfecta
En la provincia de Bretaña, la crêpe era un alimento básico y popular, como el pan. Fueron los bretones los que empezaron a rellenarlas con un sinfín de ingredientes, por eso hoy en día existen muchas variedades de crêpes y galettes, frías o calientes, dulces o saladas, que se sirven como plato principal o postre.
La diferencia principal entre una crêpe y una galette es por la harina que se usa: harina de trigo para las crêpes y harina de trigo sarraceno para las galettes. Además, a las últimas solo se les suele añadir agua y sal, además de huevos, mientras que las primeras llevan huevos, leche, azúcar, vainilla o alcohol.
Esta ha sido la receta que he escogido para el reto de las Cooking Challenge de este mes, en el que (¡por fin!) vuelvo a participar y con el que “reabro” este blog después de un parón de varios meses. Como siempre, no os perdáis las propuestas de mis queridísimas amigas: Lourdes, Elvira.
¿Qué te gusta más, una crêpe dulce o salada?
Galette bretonne o crêpe de harina de trigo sarraceno
Ingredientes para las crêpes:
330 g de harina de trigo sarraceno
1 huevo
10 g de sal gruesa
750 ml de agua fría
Ingredientes para el relleno:
Queso Emmental rallado
4 huevos
4 lonchas gruesas de jamón de York
Mantequilla
Preparación:
Para hacer la masa de las crêpes, ponemos todos los ingredientes en un vaso alto y los batimos con un túrmix hasta que estén todos unidos. Dejamos reservar esta masa durante una hora.
Pasado este tiempo, untamos ligeramente con mantequilla una sartén antiadherente y la ponemos al fuego. Si la hemos engrasado demasiado, retiramos el exceso con un papel de cocina. Echamos un cucharón de masa en la sartén y la movemos ligeramente para que se extienda por toda su superficie. Se formarán unos agujeritos. Cuando esté hecha le damos la vuelta.
Ahora toca repartir el relleno sobre la masa. Con cuidado, cascamos un huevo y espolvoreamos con el queso rallado y el jamón de York. Dejamos que el huevo cuaje y el queso se derrita. Doblamos las esquinas en forma de sobre, para darle su característica forma a la galette, y servimos.
Con qué acompañar la galette bretonne
Las posibilidades de rellenar una galette bretonne son infinitas, yo me decanté por la receta clásica: queso fundido, jamón de York y huevo, pero basta con que dejéis volar vuestra imaginación para conseguir un resultado sorprendente. Las serví con lechuga y tomate.
A mi hijo le gustaron muchísimo, así que me tocará repetirlas en breve. Y a ti ¿con qué rellenas las crêpes? Espero tus sugerencias, creo que me he viciado con esta especialidad francesa.