Se va acercando el buen tiempo y como muchos sabéis, por lo general con un gallo en el corral llega. Nosotros teníamos tres gallos y muy pocas gallinas, así que las pobres empezaban a vivir bajo un nivel de estrés muy alto. Por no decir que tres despertadores de mañana son mucho! Decidimos preparar el gallo guisado, con mucho sabor y ese color oscuro tan característico de los gallos caseros. El resultado merece la pena.
INGREDIENTES:
1 GALLO DE NUESTRO CORRAL
2 CEBOLLAS
1 PIMIENTO VERDE Y ROJO
1 DIENTE DE AJO
2 CUCHARADAS DE ACEITE DE OLIVA
1 PIZCA DE SAL
1 PIZCA DE PIMIENTA
1 PUNTITA DE TOMILLO Y ROMERO
1 VASO DE VINO TINTO
1 LITRO DE CALDO DE VERDURAS ANETO ECOLOGICO
5 PATATAS
1 VASO DE GUISANTES
3 ZANAHORIAS
1 SOBRE DE COLORANTE O AZAFRÁN
1 PLATO DE PORCELANA PORVASAL
PREPARACIÓN:
- Empezamos por limpiar y cortar el pollo en trozos.
- Ponemos sal y pimienta a los trozos de carne.
- Doramos en una sartén con aceite bien caliente.
- Reservamos en una fuente.
- En la misma sartén vamos a picar la cebolla, pimiento y ajo.
- Cocinamos hasta que quede bien tierno.
- Incorporamos otra vez el pollo con el tomillo y romero.
- Mezclamos y dejamos que coja color del vino y reduzca.
- Añadimos el caldo y dejamos cocinar a fuego medio.
- Es importante que la carne quede muy tierna.
- Si el gallo es joven va a necesitar menos tiempo.
- Una vez la carne esté bien cocinada pasamos a una olla.
- Le ponemos las patatas, zanahorias y guisantes.
- Si es necesario añadimos más caldo.
- Ponemos el colorante y dejamos que se cocine lentamente.
- Las patatas tienen que quedar muy blandas, que se nos
deshagan prácticamente en la boca.
- Se van a redondear los cortes del cuchillo.
- Este guiso está incluso más bueno al día siguiente.
- Servimos caliente con pan para mojar en la salsa.
- Si el gallo está bien cocinado la carne tiene que desprenderse con
mucha facilidad del hueso.
Buen provecho a todos!!