Muchas veces no consumimos todas las legumbres necesarias para nuestro organismo, ya que, por ejemplo, en verano no atrae tanto comer platos de cuchara tipo potajes, que es lo que solemos hacer con las legumbres. Parece que no somos conscientes de la infinidad de recetas que podemos preparar y ensaladas que podemos hacernos, por ejemplo, con unos garbanzos o unas lentejas.
La receta de hoy es muy fácil y nutritiva y no es el típico potaje, sino un salteado muy versátil que nos podemos llevar en un táper y comerlo tanto en frío como en caliente.
Dicho esto, vamos al tema!
Ingredientes (para 2 personas):
- 180 grs de garbanzos remojados la noche anterior
- sal marina sin refinar
- un trocito de alga kombu (o cualquier otra)
- 300 grs de espinacas crudas (más o menos es como una bolsa de las compradas)
- una zanahoria rallada o troceada
- un trozo de cebolla picada
- un ajo picado
- un chorrito de aceite de oliva virgen extra
- semillas de sésamo
- salsa de soja
Preparación:
Cocemos los garbanzos con agua, el alga y sal hasta que estén listos.
Echamos un chorrito de aceite de oliva en una sartén y sofreímos la cebolla y el ajo, cuando empiecen a dorarse, añadimos la zanahoria cortada como más os guste y, a continuación añadimos las espinacas previamente lavadas y cortadas. Cuando ya casi estén las espinacas, añadimos los garbanzos y salteamos durante unos minutos y cuando apaguemos el fuego, antes de retirar, rociamos con un chorrito de salsa de soja. Luego en el plato, podemos añadir unas semillas de lo que más os guste, yo en este caso, he puesto semillas de sésamo.
Los garbanzos son una de las legumbres más energéticas, además son ricas en ácido fólico, fibra, potasio y fósforo. Por otra parte, las espinacas frescas son ricas en vitamina K, B9 y, sobre todo, vitamina A, clave para prevenir enfermedades oculares, fortalecer el sistema inmunitario y mejorar el estado de la piel.
Espero que disfrutéis elaborando esta receta y, sobre todo, saboreándola!