Como ya dije en las anteriores publicaciones mi intención era dedicarle algunas entradas de mi blog a las recetas de toda la vida, estos grandes clásicos de la cocina de donde sea, que en mi opinión no deben olvidarse, ya que al fin y al cabo son un poco por decir algo las raíces. Soy una apasionada de la cocina clásica, me gustan los restaurantes que por desgracia quedan muy pocos y los que hay están en peligro de extinción, que conservan ese aire elegante y a la vez clásico en donde te sirven camareros de la vieja escuela, que son capaces de prepararte un tártaro delante o de flambearte unas fresas o una carne o trincharte una buena vianda.
Estos lugares que poco a poco van desapareciendo y que si no es así son establecimientos con precios caros desprenden sentimientos de la cocina de antes y donde todavía se pueden encontrar esos platos que recuerdan la tradición.
Pues bien hoy he traído uno de ellos, un postre español por supuesto, como no íbamos a empezar con uno de los nuestros, y que se encuentra todavía en muchos restaurantes y que es como un bocadito de cielo en el paladar: hablamos de los tocinillos de cielo.
El nombre de tocino de cielo se debe a la delicadeza de su textura y sobre todo a su origen religioso, era un postre que preparaban habitualmente las monjas en los conventos mayoritariamente en Jerez de la Frontera donde la tradición de elaborar vino y la utilización de las claras de huevo para clarificarlo daba lugar a que sobraran muchas yemas que se les entregaban a las monjitas y que ellas preparaban este delicioso y delicado postre celestial. Asturias también tiene gran tradición de la elaboración de este dulce.
El tocinillo es una especie de flan que solo lleva yema de huevo, azúcar y agua, hay quien lo aromatiza con canela o limón pero el auténtico no lleva nada y se le puede acompañar como es nuestro caso de hoy con algún tipo de salsa o coulis un poco ácido para equilibrar un poco el exceso de dulzor del tocinillo. Bon profit!
Tiempo de preparación: 20 minutos + 15 minutos de cocción
Dificultad: baja
Coste: bajo
INGREDIENTES PARA LOS TOCINILLOS (8 unidades como las de la foto)
12 yemas de huevo
350 g. de azúcar
¼ litro de agua
INGREDIENTES PARA EL COULIS DE FRAMBUESAS
300 g. de frambuesas congeladas
150 g. de agua
MODO DE PREPARACIÓN DE LOS TOCINILLOS
Se prepara un almíbar mezclando el agua y el azúcar a punto de hebra, eso quiere decir que unos 4 minutos cuando empieza a hervir.
Dejar templar.
Con un poco del mismo almíbar untamos bien los moldecitos en donde vamos a cocinar nuestros tocinillos.
Ponemos las yemas en un bol y mezclamos removiendo el almíbar.
Se suele quedar una espumita arriba y es mejor colarlo si tenéis por una estameña y si no por un colador fino o también podéis quitarla con una cuchara.
Llenamos nuestros moldecitos dejando un dedo vacios, los colocamos en una bandeja al baño maría y los tapamos.
Si se hace con horno convencional se ponen en un baño maría y tapados se cocinan a unos 160 grados unos 15 minutos.
Si utilizáis horno de vapor o vaporera los colocáis en la rejilla y tapados con papel film durante unos 15 minutos.
Podéis comprobar con una brocheta si están cocidos por el centro.
Dejar enfriar y guardar en la nevera hasta servirlos.
Cuando los vayáis a desmoldar basta que con una puntillita despeguéis los bordecitos si está bien untado de almíbar saldrán fácilmente.
Servir fríos acompañados de coulis de frambuesas.
MODO DE PREPARACIÓN DE LA SALSA DE FRAMBUESAS
Ponemos las frambuesas y el azúcar en un cazo al fuego.
Dejamos que el azúcar se disuelva y lo cocemos unos 10 minutos a fuego suave removiendo de vez en cuando.
Si queréis podéis triturarlo con el brazo batidor y colar por un colador de manera que no salgan pepitas de las frambuesas.
También lo podéis colar directamente sin triturar.
Dejar enfriar en la nevera. Esta salsa se conserva durante unos 10 días por su alto contenido en azúcar, siempre en la nevera.
MODO DE PREPARACION DE LOS TOCINILLOS PASO A PASO Y EN FOTOGRAFIAS
ALGUNOS CONSEJOS UTILES
-Para que quede un resultado óptimo los huevos han de ser súper frescos, además del color de la yema depende el color del tocinillo. Los huevos bien frescos y de gallinas de corral tienen las yemas mas anaranjadas.
-El almíbar al mezclarlo con las yemas debe estar templado porque de lo contrario cuajaría las yemas y quedarían grumos.
-Se puede hacer un caramelo para untar los moldes también pero el verdadero tocinillo no lo lleva.
Espero que disfrutéis de este postre tan nuestro y tan dulce, gracias a todos por leer mi blog y por seguirlo. Bsssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss