A partir del primero vinieron muchos más. Sobre todo cuando se acercaba alguna reunión con amigos donde todo el mundo llevaba algo. Yo siempre optaba por llevar algo dulce, y el brownie era y es un éxito seguro :)
Mi debilidad son los que llevan galletas oreo, cómo no. Y es que si algo que es dulce lo puede ser un poco más, no puedo resistirme :D
Revisando mis marcadores en busca de nueva receta que probar, me dí cuenta que muchos blogs compartían la misma. Los mismos ingredientes, las mismas cantidades...Hasta parecía el mismo brownie en todos los blogs!
Los brownies tenían esa capita crujiente que les caracteriza y ese bizcocho espesito y jugoso.
Y es que todos habían nacido de la receta de Lorraine Pascale, la ex-modelo tan conocida en el mundo repostero que decidió pasarse al mundo de la cocina y que te deleita todos los sentidos con solo verla cocinar.
Si teneis oportundidad de ver Canal Cocina, podreis disfrutar viendola cocinar. Este verano pude ver algunos programas y me quedada embobada. Te transmite esa sensación de que toda receta es sencilla y que puedes conseguir resultados espectaculares. Todo es ponerse y hacerlo con pasión.
"Así que no se hable más" pensé. Me puse manos a la obra. Y lo que salió de mi horno fue esta maravilla :)
Eso sí, sólo al final me dí cuenta que olvidé añadirle nueces. Pero fue darle un bocado y me olvidé de las nueces, de los problemas y de hasta la hora que era :D
Las referencias, en este caso, el blog Llámame tonto pero dame pan no se equivocaban ;)
Os mando un trocito de este brownie para endulzaros el fin de semana y desearos que lo disfruteis al máximo.
¡Hasta la próxima receta!
Ingredientes:
3 huevos enteros
2 yemas
165 grs. de mantequilla
165 grs. de azúcar moreno
154 grs. de galletas oreo (1 paquete)
200 grs. de chocolate negro para postres
2 cucharaditas de extracto de vainilla
2 cucharadas bien llenas de harina (yo usé harina de espelta)
1 cucharada de cacao puro Valor
1 pizca de sal
Elaboración:
Ponemos la mantequilla en un cazo a temperatura ambiente y calentamos para que se derrita a fuego lento. Una vez derretida le añadimos el chocolate a trozos y cuando se derrita removemos bien para que se integren ambos ingredientes.
Por otra parte, batimos con la batidora de varillas los huevos, las yemas y la vainilla a máxima velocidad unos minutos hasta que coja más volumen. Precalentamos el horno a 180 º calor arriba y abajo.
Añadimos a la mezcla de los huevos el chocolate fundido y lo hacemos poco a poco por un lateral. Luego echamos la harina, el cacao y la sal, y con una lengueta vamos removiendo con movimientos envolventes.
Por último, agregamos las galletas partidas con las manos a trocitos y dejamos unas 4 o 5 galletas para decorar.
Engrasamos un molde con mantequilla, lo cubrimos con papel de horno y encima vertemos la masa. Por último, ponemos trocitos de las galletas oreo que habíamos reservado por encima. Metemos al horno unos 30-40 minutos, siempre vigilando y comprobando con el tenedor a que por dentro esté hecho. Yo lo horneé 30 minutos y la masa ya estaba cocida.
Dejad enfriar y disfrutad del olorcito que habrá dejado por toda la casa :)