Como me sobraba un cuarto de litro de leche de un tetrabrik, se me ocurrió que podía freírla puesto que hace años que no comemos leche frita en casa.
Ingredientes (9 unidades):
250 ml de leche
1 cucharadita de canela en polvo
1 huevo
4 cucharadas soperas de azúcar
1 mandarina (su piel rallada)
2 cucharadas soperas de harina de fécula de maíz (Maizena)
Harina de trigo (para rebozar)
Aceite de girasol
Azúcar (para espolvorear)
Sal
Preparación:
Colocamos en una cazuela la mitad de la leche, junto con el azúcar, la ralladura de mandarina y la canela, calentamos hasta su ebullición.
Mezclamos la otra mitad de leche en un recipiente con la Maizena y dejamos reposar para que se deshagan todos los grumos, mezclamos bien.
Cuando la leche llegue a ebullición, añadimos la leche con la Maizena y removemos continuamente hasta que comience a hervir, retiramos del fuego.
Si se nos han formado grumos podemos pasarle la batidora para que nos quede una crema finita.
Aceitamos un molde de silicona rectangular y volcamos toda la crema que hemos preparado, dejamos enfriar e introducimos en el frigorífico un par de horas.
Pasado este tiempo, desmoldamos, troceamos y pasamos por harina y huevo batido (sazonando este).
Freímos en abundante aceite de girasol.
Dejamos escurrir el sobrante de aceite sobre un papel de cocina.
Colocamos en un plato y espolvoreamos con azúcar.
Se puede comer fría o caliente.