Después de muchos experimentos y catas hoy puedo compartir contigo los secretos de un auténtico Brownie americano y los 5 errores que no puedes cometer para lograrlo.
Antes de meternos en faena quiero hablarte del ingrediente fundamental y absoluto protagonista de este delicioso pastel: el chocolate. Es importante conocer el producto con el que trabajamos, porque solo así podremos dominarlo y sacar lo mejor de él.
Todo lo que deberías saber sobre el chocolate
Las habas de cacao son el origen de todo el chocolate. Existen multitud de variedades de cacao, mas fuertes y más suaves, por ello el sabor del chocolate varía sustancialmente dependiendo de cual se utilice para su elaboración.
El chocolate se elabora mezclando azúcar con dos productos derivados de las habas de cacao: la pasta de cacao (la materia sólida) y la manteca de cacao (la materia grasa). Las diferentes proporciones de estos tres ingredientes dan lugar a los diferentes tipos de chocolate.
Los chocolates más puros son aquellos en los que la pasta de cacao es dominante y las cantidades de azúcar y manteca de cacao se añaden en menor proporción.
El chocolate con alto contenido en pasta de cacao es saludable pues está comprobado que contiene una cantidad de antioxidantes superior al de la mayoría de las frutas. Contiene fibra, vitaminas y minerales como magnesio, hierro y calcio. Además contiene triptofano que es un precursor de la llamada hormona de la felicidad, por ello es un alimento que produce placer.
Pero seamos sensatos, la mayoría del chocolate comercial con poco contenido en pasta de cacao es una bomba de azúcar y grasas y puede ser de todo menos saludable.
Es primordial que intentemos usar en nuestras elaboraciones, chocolates de buena calidad, con altas proporciones de cacao. Además de ser mas saludables el sabor es mucho mas profundo.
El buen ingrediente es la base de todas las recetas que elaboremos. Nunca obtendrás el mismo resultado con ingredientes de buena calidad que con los mismos de baja calidad, así que lee la etiqueta y elige un buen chocolate.
El brownie no tiene la textura de un bizcocho, ni debe ser esponjoso. Un buen brownie tiene que ser denso, húmedo, tierno en su interior y crujiente en su exterior. Para conseguir esta textura debemos evitar algunos malos hábitos.
Los 5 errores que no puedes cometer para preparar el Brownie perfecto
El brownie de chocolate se hace con chocolate. Aunque suene redundante, insisto en utilizar un chocolate de alta calidad y con un porcentaje de no menos del 72 % de pasta de cacao. Encerramos bajo llave el cacao en polvo que resecará la masa y también los chips o gotas de chocolate que contienen estabilizantes que aportan a la masa algo que no necesitamos.
El chocolate se derrite al Baño María y despacito. Si lo que quieres es potenciar el sabor del chocolate y obtener la textura densa y húmeda, olvídate del microondas. Hay que derretirlo al baño maría siempre y a temperatura baja, para asegurarnos que lo hace despacito y sin cambios bruscos de temperatura que dañan el sabor del chocolate y le hace perder humedad.
El brownie no es una masa cruda. Uno de los errores más habituales para intentar conseguir la textura húmeda y tierna es no darle un buen punto de cocción y dejarlo medio crudo. ¡No hay nada mas desagradable! La textura se consigue con la receta adecuada, la forma de combinar los ingredientes y el tiempo justo de horneado.
El chocolate y la mantequilla se fusionan en un solo ingrediente. ¡Imprescindible! Si bates la mantequilla con el azúcar y luego le añades el chocolate la textura será de bizcocho. Para obtener la verdadera textura de brownie americano debes fundir el chocolate y la mantequilla como hablamos en el punto 2 hasta conseguir un solo ingrediente que añadiremos a los ingredientes secos.
El brownie se sirve frío. ¡Si, lo has oído bien! Existe una falsa creencia de que los brownies deben de comerse recién salidos del horno o como mucho templados para que no se queden como una piedra pómez y tengas que usarlos para pulir los talones. Si eso te ocurre es porque no has utilizado la receta correcta o no lo has horneado bien. Un buen brownie se asienta cuando enfría y el sabor se acentúa con el reposo sin perder jugosidad.
Existen multitud de combinaciones para elaborar el brownie: Oreo, frutos rojos, mantequilla de cacahuete, toffee... El más tradicional es el que simplemente añade nueces que no enmascaran el sabor del chocolate. Mi preferido es el sencillo, sin ningún aporte extra, solo chocolate. Y esta es la receta que quiero compartir contigo y que me gustaría que probaras en cuanto tengas ocasión, ¡Es simplemente perfecta!
Los 5 errores que no puedes cometer para preparar el Brownie PerfectoTuitear ésto a twitter
La receta del auténtico Brownie americano
Ingredientes
250 gr mantequilla a temperatura ambiente
115 gr de chocolate con el 81 % de pasta de cacao
60 gr de chocolate con el 71 % de pasta de cacao
4 huevos L a temperatura ambiente
110 gr harina común sin leudante
200 gr azúcar blanquilla
100 gr azúcar moreno
1 cucharadita de café de vainilla en pasta
5 gr sal
Elaboración
Tamizamos la harina y la sal y reservamos.
En un cazo al baño maría colocamos la mantequilla en trozos y sobre ella los dos tipos de chocolate troceado. Mantenemos a fuego suave, removiendo hasta que se disuelva por completo y ambos ingredientes se integren. Retiramos del fuego y añadimos el azúcar moreno. y la vainilla en pasta. Removemos y reservamos.
En un bol ponemos 2 huevos con 100 gr de azúcar blanquilla y removemos manualmente con unas varillas simplemente para mezclarlo pero sin airearlo. Añadimos esta mezcla al chocolate que teníamos reservado, lentamente y sin parar de remover para que los huevos no cuajen con el calor del chocolate.
En el bol de la batidora ponemos los 2 huevos y los 100 gr de azúcar blanquilla restantes. Batimos a velocidad alta hasta que monte y doble su volumen. Vertemos sobre la crema de chocolate y con una espátula y movimientos envolventes integramos delicadamente.
Por último añadimos la mezcla de harina y sal que teníamos reservada e integramos nuevamente con ayuda de una espátula.
Volcamos la mezcla sobre un molde cuadrado de 20 x 20 cm forrado con un papel de horno y rociado con spray desmoldante. Introducimos en el horno precalentado a 200 º C y bajamos la temperatura a 175 º C. Horneamos durante 25 minutos.
Retiramos del horno y dejamos que enfríe por completo en su propio molde sobre una rejilla. Es el momento de cortar en porciones con la ayuda de un cuchillo de sierra que habremos calentado en agua caliente y secado. Espolvorea ligeramente con azúcar glas y pon sobre un plato de servir.
Espero que esta información te haya sido de ayuda y que a partir de hoy consigas por fin el Brownie Perfecto. Espero como siempre tus dudas o comentarios. ¡Me encanta leerte!
Besos
Laura