Esta semana compré pimientos para asarlos y después de comprarlos me dio por hacer mermelada para tener reservada para alguna ocasión especial.
Siempre me gusta tener mermeladas caseras, nos sacan de más de un apuro. Esta en particular, la podemos poner para acompañar a cualquier carne, para poner sobre tostas o canapés con queso tipo philadelphia...en fin, para lo que tu imaginación y tu paladar te sugieran.
Con los ingredientes que os pongo me salieron 4 botes pequeños ( o 2 botes de los de mermelada de toda la vida).
INGREDIENTES:
2 pimientos rojos lavados y sin rabito (unos 400 gr)
150 gr de azúcar moreno
50 ml de vinagre de vino blanco
50 ml de agua
MANUAL
Le quitamos a los pimientos el rabito y los nervios blancos que van por dentro. Los lavamos bien y los cortamos a trocitos más bien pequeños.
Los ponemos en una cacerola junto con el azúcar, el vinagre y el agua y los ponemos a fuego medio removiendo de forma más o menos continuada para que no se nos pegue, durante unos 30 minutos.
Pasado este tiempo, los batimos hasta dejar una crema muy fina, así no notaremos la pieles de los pimientos.
THERMOMIX
Le quitamos a los pimientos el rabito y los nervios blancos que van por dentro. Los lavamos bien y los cortamos en 4 trozos cada uno.
Trituramos 6 segundos, velocidad 10.
Ponemos todos los ingredientes en el vaso de la thermomix y programamos 30 minutos, 100º, velocidad 2. Ponemos el cestillo para que evapore mejor el líquido.